Desde las nueve de la noche del domingo 5 de
febrero se vivió una nueva jornada de clasificatorias del Concurso Oficial de
Agrupaciones Carnavalescas 2006, la séptima preliminar ya. De trece. Una noche
que contó con lo mejor y lo peor. Y cositas más o menos. En el lado bueno bueno,
la comparsa de Quiñones “La Caldera” y la chirigota de el Sheriff, “Los
aguafiestas”. Como se preveía, tenía al público a favor, y les costó poco
engatusarlos con buenas voces, música y letra. En el otro lado, el cuarteto de
San Fernando puso el nivel de la modalidad por los subsuelos, con una actuación
que pedía a gritos la retirada antes de tiempo. Y así fue, ante un público que
más que reírse con se cashondeaba de. Por lo demás, simpáticos pasos del coro
“Fiestón pagano” y de la chirigota de aceitunas. Y curiosa la actuación de la
comparsa llegada desde Salar, el grupo que más utilizó la palabra “carnaval/es”
por metro cuadrado. Lea lea, que es gratis.
“FIESTÓN PAGANO”, INNOVANDO EN EL BOTELLÓN
Un
coro nuevo de verdad, con chicas de bajo, y una baja por atropello de camino al
Falla. Tiene guasa. Apenas una treintena de componentes se montan una fiesta –fiestón-
en el escenario, con un tipo diablesco. Es el coro de la capital “Fiestón
Pagano”, de Germán Moreno Pérez y Daniel Domínguez González. Con la primera
letra defienden su estilo novedoso, su “tango que no suena a tanguillo de los
puristas de antaño…”, y el que lo quiera, pa él. “Mañana es fiesta porque tengo
una entrevista en un cursillo”, pero lo de siempre, afeitaté, quítate los
pendientes, arréglate. Vamos, un canto contra el falserío de las apariencias en
el segundo tango. Cuplé a los liasos de las profesiones y los trabajos, fíjate
que de presidente está un zapatero. Estos chicos iban para curas hasta que les
pusieron un rabo. Distrae, sin mushas más pretensiones. El popurrí es una
defensa a ultranza del botellón. Más música y escenificación que letra. Al
final, salen tres señoritas bastante potentes a calentar aún más el fiestón. ¿Se
atreverán a llevarlas a la Plaza?
“LOS AGUAFIESTAS”, METIENDO UN BUEN PIPO
De
fiesta en fiesta este domingo. Con la chirigota del Sheriff, Juan Manuel Braza
Benítez, “Los aguafiestas”. De picoletos. Y poniendo multas a to quisqui, aunque
al jurado, depende de cómo se comporte. El tipo de Guardia Civil y la Viña se
funden en un primer pasodoble con shentimiento. En el segundo pasodoble
pretenden limpiar el cuerpo de la benemérita de esa imagen de malos que les
cuelga, que ellos también tienen mujer y niños, y que están en la carretera para
que tú la sigas teniendo. Mu potito. Cuplés a un accidente que tuvo un señor con
gran miembro, y a la nueva normativa de tráfico, que ya tienen to los
accesorios, solo les falta el coche. “Como te ponga el pipo… iin iin iin”. En
el popurrí nos cuentan una de sus peculiares jornadas de trabajo, con musho
arte. Esta chirigota civil, ahí está, pa servirle. El Sheriff y su grupo
defraudan pocas veces, y este año tampoco. Además de hacer pasar un gran
ratillo, la música y las voces son de categoría. Creo que ya me he ganao que me
quiten la multa de la otra noshe, no?
“EL EMBRUJO DEL SUR”, AL CALDERO
El
Brujo dos, versión light. Prepárense. Y apaguen esa freidora, qué pesha de humo.
Es el turno de “El embrujo del Sur”, desde Las Cabezas de San Juan, con letra y
música de Rubén Gil Quiñones. Sobriedad en el ambiente. “Qué más dá quién es
quién”, otro pasodoble al amor en general, que cada uno quiera a quién quiera y
como quiera. El asunto es querer. Cuplés eternos, a los amoríos clandestinos de
Lola Flores, echándoles guindas al pavo; y al asunto del helicotéro de Rajoy y
la Espe. Popurrí sin estridencias y ovacionado por la family. Lo bueno si breve,
dos veces buenos.
“JUAN Y MÉDIUM EN BUSCA DEL ESPÍRITU DE CAI
¡¡¡HOLA QUE HAY???”, UUMM
“No
te como el nabo porque va a quedá mu ordinario delante de la gente”. Es una de
las primeras intervenciones que lo dice todo del cuarteto de La Isla “Juan y
Médium en busca del Espíritu de Cai ¡¡¡Hola que hay???”, de Manuel Bustamante
Roda, José María Pardal Lorite y Juan J. Varea Torrejón. Dos notas que visitan
un espiritista para que les comunique con un amigo muerto con la quiniela
premiada, el Carmelo. La mitad del repertorio no se oye, se olvidan del texto,
es borde en la mayoría de los remates, se llevan medio popurrí murmurando entre
ellos que se van, y lo peor, que no se van. Con todo, los shavales pasan un mal
rato impresionante, y el público, mientras duran en escena, se dedica a reírse
de ellos. Eso no mola. “Grasia por resucitá al cuarteto”, vocean desde el
gallinero. En fin.
“LAS ESPAÑOLAS”, COMO NINGUNA
Tras
el momento tú ya sabes de la noche, una tapita, de aceitunas. Que es gratis,
menos en El Faro. Asín se presentan los chirigoteros de la capital de “Las
Españolas”, de Emilio José Castañeda Rueda y Francisco José Rueda Romero. “Qué
falsa es la gente en los carnavales”. De nuevo otro pasodoble a la verdadera
amistad, y claro esa está en el grupo de uno mismo, y que le den a los que
cantan por dinero y fama. El segundo, contra el euro, y pro duros, esos de 5
pesetas. Son aceitunas con pimientos. Que bien pegarían ahora con una cervesita.
Pero a los del foso nos tienen sequitos. Diálogo entre utensilios del cuarto de
baño en el primer cuplé; y en el segundo entre fumadores y no fumadores.
Graciosos. No les des mordisquitos, que se van a queá en los huesos, cómete
mejón el jamón y el queso. Mejora el voluntarioso popurrí. Y que se vayan
tranquilos, que a estas olivas no se las come naide.
“LA CALDERA”, ECHANDO HUMO
“Vamos
a quemar las coplas hasta que esto nos reviente”, el carnaval y todo lo que
lleva dentro, al rojo vivo con “La caldera”, comparsa de Joaquín Quiñones y
música de Manuel Sánchez Alba –el Noly- y José Antonio Cheza. Voces portentosas.
Y ¡cómo funciona esta caldera! De momento con un primer pasodoble de piropo a
Cádi, y sus papelillos, con un compás disfrazado y con plumero, que huele a sal.
Bonito. Y mejor cantado. Para darle un poco de más caña al motor, letra a
Farruquito, ostentando de boda cuando aún no se ha arrepentido de aquel mortal
atropello, dicen, “tú ta has creído que está to perdonao… y que la muerte se
pisa bailando por bulerías”. Interesante, pero Quiñones, pisha, ten cuidaito con
la family del bailaó, que saben dónde vives. El Palacio de la Zarzuela con
máquinas de condones y los canales digitales con documentales hiperrealistas y
gavilanes, los temas de los cuplés rematados por un gran estribillo, “que nunca
se apague este fuego, que a mi es lo que me da vía… Cádiz que ya tengo el
corazón en llamas vivas, en llamas vivas”. Popurrí calientito, quemando todo
aquello que sobra para hacer furular la máquina, “más fuego más llama… y que
esta caldera ya nunca se apague”. Peaso de comparsa una vez más la de Quiñones,
como no podría ser de otra forma. Aunque ya veo por ahí alguno derrotando,
diciendo que es una copia del Vapor de Martínez Ares. Como le gusta a la peña
echar carbón.
“LOS QUE TIENEN Y LE CABEN TELA”, MUSHA PLUMA
Con
la música del Espíritu de Cádiz se presenta el “espíritu del gay”. La chirigota
de Algeciras de Juan Antonio Pozo Acuña, “Los que tienen y le caben tela”. De
modistas, como la de este año del Selu. ¿Espionaje carnavalesco? Como suele
pasar con estos tipos estereotipados, dicen que no tienen nada contra ellos, en
este caso los homosexuales, pero se cashondean de ellos, no? Vuelven a
reivindicar que se puedan casar por la iglesia, “qué difícil es ser una mujer
cuando se está encerrado en el cuerpo de un hombre”, esa es su idea de estas
personas. Las voces, mejorables, y la letra, populista. En el segundo pasodoble
lamentan de las comodidades que el Estado ofrece a los presos en nuestras
cárceles, sobre todo a los pudientes, “yo vivo en un país donde la leyes
inmunizan y privilegian a quien más dinero tiene”. Uuum, no sé, habrá que
preguntarle al Ministro de Justicia, que es canario, y ahí también saben de
carnavales. En cuplés y estribillos dejan claro que les cabe tela, con borderíos
sugeridos. Y unas compresas problemáticas que depilan la zona de los compañeros.
El popurrí es una sucesión de mamadas, o algo asín. Ya he desconectao.
“AL SON DE FEBRERO”, CARNAVAL, CARNAVAL, CARNAVAL
“Carnavaleando,
la vida se va pasando”, con ritmo movidito pisan las tablas los amigos de Salar,
la comparsa “Al son de febrero”, de Rocío Molina Castilla y Antonio Cruz
Almagro. En este pueblo granadino los gaditanos tenemos un amigo, dicen. El
tipo… de Carnaval. El primer pasodoble, de carnaval. Más o menos, justifican su
amor por la fiesta y que se pasan “por febrero” las críticas. En el segundo se
muestran prorepublicanos, con izada de bandera y todo. Viva la república y viva
la polla –¿o poya?-, lo más típico de Granada, comentan. Ma´cabo de enterá. El
segundo cuplé acaba como el primero, con eso empinado de ver a una gashona en la
tele. Para la próxima actuación podríamos hacer un recuento de las veces que
repiten la palabra “carnaval/es”, que la vais a gastar, quillo. Por asquí se
rumorea que no va a ver próxima actuación, al menos en el Falla. Sin embargo, la
comparsa asegura en el popurrí que sabe esquivar los cañonasos de los doctorados
en serpentinas. Dale a los timbales. 2.453 veces. “Carnaval/es”, se ha quedado
en “carn”. Se llevan la libertad y cuando juegan con las voces, no se les
entiende ni papa. En la presentación cantan algo asín como “que no falten los
tontos de turnos esos que te aplauden para no quedar mal”. Yo escucho palmas.
“LAS VIVALAVIDA”, SIN COMPROMISOS
Después
de desahogarme con los amigos granaínos –no os lo toméis a mal, que hay que
tener dos carnavales para subirse ahí arriba, y es mu fácil rajar desde aquí
abajo-, pasamos a la chirigota de Puerto Real, “Las vivalavida”, divorciadas, de
Manuel Antonio García Grondona y Andrés López Costa. “No nos veremos en la Viña…
nos veremos en el Holliday”. Pasodoble que une a la Villa de Puerto Real con
Cádiz, “la vereíta que hasta Cái me hace llegar, sólo un paseíto nada más”. En
el segundo pasodoble critican que haya tantas leyes discutibles y revisables, y
les haya dado por “la cortina de humo” de la ley antitabaco. Música muy
chirigotera. Cuplés muy normalillos. Y pupurrí pasable. Se nota que mañana,
bueno, ya hoy, es lunes. El Teatro, semivacío. Pero ahí está Vicente Sánchez, en
la soledad del palco municipá. Bueno, ya no está.
“LA FUENTE DE MI VIDA”, CHORREANDO PAPELILLOS
Agüita
fresca para ir cerrando y despertar a los que están más pa allá que para acá.
Agüita que se convierte en papelillos y coplillas surtiendo de “La fuente de mi
vida”, comparsa de Sanlúcar de Barrameda de Agustín Manuel López Pedrote. Tipo
acuoso, de fantasía. El primer pasodoble, directo a los pederastas, para quienes
piden la ley del talión. Curiosa manera de empezar y acabar, por lo bajini. En
el segundo, una mujer embarazada se ve en la angustia de decidir entre una hija
o la otra, “cómo le quito la vida a quien la vida le di”. Alegría en el
estribillo entre dos cuplés de comparsa. El grupo suena muy bien, y el popurrí
pasa entre chorros por aquí y por allá, pero los pocos que quedan, mirando el
reloj. Las 2.04 horas y el telón cae por última vez hasta dentro de un rato. Pa
mi que me está afectando ya algún virus de los que pululan por el Falla. Mañana
les cuento si sigo vivo. En el mismo sitio, y a la misma hora. Y hoy, más que
nunca, perdonen las molestias. |
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