Una de las opciones más populares para aislar de la luz y ofrecer intimidad en casas y oficinas son las persianas venecianas. Tan comunes como los estores y los paneles japoneses, las venecianas son una opción excelente si se quiere permitir el paso de la luz y estar a salvo de miradas indiscretas. Además, tienen un encanto especial que favorece el crear un espacio acogedor. Descubramos todo sobre ellas.
¿Qué es una persiana veneciana?
Las cortinas venecianas son un tipo de persianas formadas por lamas de mayor o menor grosor. Están fabricadas en diferentes materiales, aunque lo más común es encontrarlas en madera o aluminio. Además de esas lamas, las venecianas incluyen cordeles para poder subirlas y bajarlas, y unas varillas que permiten que se queden recogidas o extendidas. Por su funcionamiento, las lamas varían de posición y dejar pasar, o no, la luz.
Un poco de historia
Podrías pensar que este tipo de cerramientos de ventanas provienen de Venecia, pero no es así. Por la etimología de la palabra persiana, podemos concluir que su invención se la debemos a los persas. En francés, persienne, que significa habitante de Persia, y fueron ellos los que comenzaron a utilizarlas con el mismo objetivo que en Europa se utilizaban las contraventanas. El apellido venecianas se lo ganaron porque llegaron al Viejo Continente a través del puerto de Venecia.
Por qué elegir persianas venecianas
Aunque tradicionalmente las venecianas se instalan en oficinas y fábricas, cada vez es más común encontrarlas en diferentes habitaciones de las casas. Son muchos los que optan por instalarlas en la cocina, el salón o, incluso, en los dormitorios. Esto se debe a la tendencia de decoración industrial que lleva años como una de las principales, y a las ventajas que ofrece la persiana veneciana:
– Permiten que la luz natural entre en las estancias, garantizando la intimidad de los que están en ellas.
– Es posible regular la cantidad de luz que dejan pasar.
– Son más fáciles y rápidas de limpiar que unos estores, cortinas o paneles japoneses.
– Como en su fabricación no se utilizan textiles, son una buena solución para las personas alérgicas, ya que no acumulan ácaros.
Por qué no instalar persianas venecianas
Por supuesto, las persianas venecianas también tienen contras, que debemos valorar a la hora de instalarlas en los diferentes espacios de la vivienda:
– Resultan frías. Por los materiales utilizados en su fabricación resultar menos acogedoras que los paneles japoneses, las cortinas o los estores. Los fabricantes de venecianas tratan de paliar este hándicap utilizando colores y materiales más cálidos, como la madera.
– Son mucho menos personalizables que los demás tipos de cortinas, ya que en su diseño predominan los colores lisos. Además, también la oferta de materiales es muy limitada.
– Las fabricadas en madera son más estéticas que las de aluminio o PVC, pero también más caras.
Qué tener en cuenta para elegir una persiana veneciana
Como habrás podido entender en el apartado anterior, debes tener en cuenta diversos factores antes de elegir una persiana veneciana o un estor, panel japonés o cortina tradicional. Por ejemplo, debes valorar la climatología del sitio en el que vives. Si hace mucho frío y es un lugar seco, los textiles serán una opción más acertada. Pero si hay humedad y un clima templado, el uso de cortinas venecianas será adecuado, ya que además de evitar que el agua se quede en el textil, evitarás la presencia de ácaros.
Otro de los puntos a tener en cuenta antes de elegir es cómo se abre la ventana en la que vas a instalar la cortina:
– Si es una ventana normal, deberás levantar la veneciana y plegarla al completo antes de abrirla.
– Si es corredera, puedes instalarla al ras, ya que no afectará a su apertura.
– Si es abatible, deberás hacerlo a entre 7 y 10 cm por encima, ya que así podrás abrir la ventana, pudiendo tener cerrada la persiana.
Por último, ten en cuenta a la hora de elegir la veneciana que esta debe medir unos 20 cm más que el ancho de la ventana (esto ocurre también con los estores). De esta manera, podrás dejar 10 cm a cada lado, y así estarás a salvo de las miradas indiscretas por la diagonal.
Tipos de persianas venecianas
Haz memoria. Seguro que te viene a la cabeza un lugar en el que hayas visto una persiana veneciana. Pero vamos a explicarte los distintos tipos que hay y te sorprenderás de todas las veces que has tenido una delante y no te diste cuenta.
Según su orientación
Por lo general, cuentan con lamas horizontales, aunque no podemos olvidar las de lamas verticales, menos habituales, pero con una función clara, el funcionar como una cortina. En estas, en vez de plegarse hacia arriba o hacia abajo, lo hacen de izquierda a derecha, y cuando se recogen, quedan en uno de los lados. Este tipo de venecianas se utilizan en grandes ventanales y también para separar los espacios en un salón u oficina, haciéndolos más grandes o pequeños según las necesidades del momento.
Según su instalación
La mayoría de las venecianas van instaladas con un perfil al techo, pero también existen las que llevan además dos en los extremos, para evitar que bailen. Estas son las apropiadas para las ventanas que están hacia dentro de la pared y cubren todos los huecos a la perfección.
Según los materiales utilizados en su fabricación
Como te explicamos más arriba, podemos encontrar persianas venecianas fabricadas en aluminio o PVC (más económicas) o en madera (más estéticas). Elegir unas u otras dependerá de tu presupuesto o necesidades decorativas.
Por qué optar por las venecianas
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