La ciudad de Cádiz contará próximamente con dos nuevas calles, dedicadas a Adela del Moral Pino y a Juan Bautista Chape y Guisado. La primera se localizará en la vía de nueva apertura ubicada en la zona de la antigua Residencia Tiempo Libre (donde se levanta ahora un hotel y un centro comercial), con entrada por el paseo marítimo y salida por la calle General Muñoz Arenillas. Y la segunda en la nueva calle con entrada por Huerta del Obispo y salida por la calle Miguel Martínez de Pinillos.
Adela del Moral es la primera mujer en la historia del Carnaval de Cádiz que ha sido reconocida con el Antifaz de Oro y es un referente femenino en el mundillo como autora durante décadas. Mientras, Juan Bautista Chape y Guisado fue el principal impulsor de la creación del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cádiz.
Ambas propuestas del equipo de Gobierno de Adelante Cádiz se han abordado en la comisión de Nomenclátor, en formato telemático, y han salido adelante con los votos favorables de, además del Gobierno local, del PSOE y del concejal no adscrito Domingo Villero. Las derechas, PP y Ciudadanos, se han abstenido.
Por otro lado, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, se ha dado luz verde al cambio de denominación de la antigua calle Alcalde Manuel de la Pinta por calle del Estrecho; así como de la plaza Clara Campoamor por plaza Ana Gertrudis de Urrutia y Garchitorena. En el primer caso, con los únicos votos del equipo de Gobierno y del PSOE, y en el segundo, también ha votado en positivo Villero.
Y pese a que igualmente las dos derechas y el edil no adscrito se han lavado las manos, se ha aprobado el traslado del nombre de la calle Alcalá del Valle a su paralela con entrada por la calle Sor Cristina López García, por una reordenación de una parcela en el Cerro del Moro.
Tras el paso por esta comisión de Nomenclátor, será el pleno municipal de febrero el órgano que tendrá la última palabra sobre todas estas propuestas.
Con las enmiendas que se introdujeron en la sesión plenaria del pasado noviembre se quedó pendiente la propuesta de asignación y cambio de denominación de la calle Alcalde Manuel de la Pinta y de la plaza Clara Campoamor. Sí se denominó Alcalde Manuel de la Pinta la anterior avenida Fernández Ladreda, pero no se renombró la citada calle, por lo que se ha abordado ahora la cuestión para así evitar la duplicidad del nombre. Y se ha nombrado ‘del Estrecho’ a la calle que se encuentra próxima a las vías Gibraltar y Algeciras, en la Zona Franca, manteniendo así la unidad en esta zona de la ciudad.
Con respecto al nombre de Clara Campoamor, ya se le dedica un tramo de la Alameda, por lo que se ha propuesto cambiar el nombre de la plaza por el de Ana Gertrudis de Urrutia Garchitorena, una pintora gaditana nacida en 1812 y nombrada por la Academia gaditana de Bellas Artes como miembro de mérito por la pintura de historia.
EL PSOE INSISTE EN EXIGIR UNA ORDENANZA
Y pese a que el PSOE ha apoyado todas las propuestas sobre la mesa en esta comisión de Nomenclátor, ha vuelto a exigir una ordenanza de Nomenclátor para la denominación y rotulación de vías, espacios urbanos, así como edificios, espacios y monumentos de titularidad municipal y para actualizar la numeración de fincas y edificios.
El portavoz municipal socialista, Óscar Torres, repite que en la actualidad no existe una regulación relativa al nomenclátor de la ciudad, si bien a efectos orgánicos y administrativos se rige por el Reglamento Municipal del propio Ayuntamiento. Por lo tanto, es el alcalde quien convoca la comisión de Nomenclátor a fin de que en el seno de la misma se aprueben o no las propuestas de cambios de nombres que se elevan posteriormente a pleno.
“No vamos a cejar en nuestro empeño hasta conseguir que se redacte la ordenanza tal y como exige el acuerdo plenario alcanzado en octubre de 2020; es imprescindible establecer un único procedimiento, unas líneas que garanticen la auténtica participación y por supuesto una seguridad jurídica”, inciden desde este partido de la oposición.
Torres destaca que el nombre de una calle no deja de ser una opción para perpetuar en la memoria colectiva de la ciudadanía aquello que se considera relevante, “de ahí la importancia de tratarlo con el rigor que esta cuestión requiere”.
Respecto a las decisiones acordadas en esta última comisión de Nomenclátor, ha valorado positivamente la aparición y modificación en el callejero de personalidades vinculadas al socialismo, como ha sido la calle para Adela del Moral; y la modificación de la calle Manuel de la Pinta, “dando así una mayor visibilidad al último alcalde de la II República, que murió asesinado en 1936 en los fosos de Puerta de Tierra por defender sus ideales”.
