La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Chiclana ha aprobado el inicio del expediente para la contratación de las obras del centro de salud Los Gallos, necesarias para su puesta en marcha comprometida por la Junta, con un presupuesto de licitación que ronda los 1,4 millones de euros. Los futuros trabajos, que siguen acumulando demoras, se ejecutarán de forma subsidiaria y se cargarán a la empresa que levantó el edificio hace años con numerosas deficiencias.
La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Chiclana ha aprobado el inicio del expediente para la contratación, mediante procedimiento abierto con un solo criterio de adjudicación, de las obras del centro de salud Los Gallos, necesarias para su puesta en marcha comprometida por la Junta de Andalucía, con un presupuesto de licitación que ronda los 1,4 millones de euros.
Además, ha sacado adelante la aprobación del pliego de condiciones económico-administrativas que regirá la contratación de estos trabajos –que se anunciaron hace meses-, así como la aprobación del gasto y la financiación. También se ha aprobado la publicación de esta licitación, para la que se ha fijado un plazo de 26 días naturales, una vez que se publique en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la portavoz del Gobierno PSOE-Ganemos, Cándida Verdier, ha explicado que “la intención es poder empezar con estas obras en primavera para que a finales de año estén acabadas y podamos poner este centro de salud en uso cuanto antes”. Además, también ha destacado que “querer es poder y esto ha quedado claro, puesto que en un año y medio hemos conseguido que estas instalaciones puedan ser reparadas y puedan, en un futuro cercano, estar a disposición de los ciudadanos, en vez de dejarlas morir, como hizo el PP durante los años que estuvo en el Gobierno”.
La edil socialista también ha especificado que “esta aprobación del expediente y del pliego económico-administrativo sólo es un paso más de los que estamos dando para que Chiclana salga adelante y se levante del letargo en el que estuvo sumida durante cuatro años”.
La construcción de este controvertido ambulatorio en el extrarradio fueron adjudicas en su momento a la empresa Elsan Pacsa, hoy conocida como Asfaltos y Construcciones Elsan. Estos trabajos se financiaron con fondos procedentes de la Junta, en virtud del convenio suscrito entre el Servicio Andaluz de Salud (SAS) y este Ayuntamiento con en julio de 2004.
Finalizada la obra y conocidos los informes relativos a defectos observados en la construcción, con fecha 23 de noviembre de 2010 se dicta un acuerdo por la Junta de Gobierno Local por el que se requiere a dicha empresa, para el reintegro de la diferencia entre las partidas ejecutadas y las certificadas, así como para la reparación y subsanación de los defectos, concediéndole un plazo de cuatro meses para su realización, bajo apercibimiento de ejecución subsidiaria a costa del contratista, con cargo a las garantías definitivas así como a las obligaciones de pago pendientes.
Interpuesto recurso contencioso-administrativo por dicha mercantil, en 2011 se acuerda la suspensión de la ejecución del acto impugnado exclusivamente en cuanto a las obligaciones pecuniarias establecidas en la resolución originaria impugnada. Y ese mismo año, el Ayuntamiento requiere de nuevo a la empresa la ejecución de las obras necesarias de reparación y subsanación de las deficiencias. La contratista no respondió y en abril de 2015 se acordó ejecutar subsidiariamente esta reparación. A todo ello siguió el acuerdo firmado el pasado 21 de diciembre de 2016.
En junio del pasado año el SAS y el Consistorio escenificaron la firma del protocolo que persigue la apertura de una vez de este centro de salud estancado. La administración local se comprometía a realizar las actuaciones necesarias para subsanar los defectos de construcción del edificio y la Junta a adscribirlo a su red de centros sanitarios de atención primaria. Entonces se aseguraba que las obras la ejecutaría de forma subsidiaria la empresa municipal Emsisa, y que estarían rematadas a principios de 2017, o sea ahora –cuando todavía ni han salido a licitación-; a partir de ahí, el consejero de Salud prometió que pondría las instalaciones en funcionamiento “a la mayor rapidez posible”.
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