CARTA AL DIRECTOR enviada por: Javier Alvero Roldán, de Cádiz
Todos los años a finales de mayo una nueva promoción de estudiantes termina segundo de Bachillerato y se despide para siempre de las aulas del colegio que les ha visto crecer y desarrollarse como alumnos y como personas para empezar una nueva etapa: la vida universitaria.
Son muchas las dudas que a uno le pueden surgir: qué estudiar, dónde hacerlo, si me va a dar la nota para lo que quiero o no… Interrogantes que en ocasiones no encuentran respuesta hasta momentos antes de terminar el plazo de inscripción a las respectivas universidades o colegios mayores en los que se van a pasar los siguientes años.
Aunque es cierto que al principio cuesta abandonar el nido familiar, normalmente se acostumbra uno pronto a esta nueva situación. Es un paso más que damos en nuestra andanza por este mundo, decidimos ya más específicamente qué es aquello que nos gusta y a lo que nos queremos dedicar el resto de nuestras vidas.
Sin embargo, una vez superada esta incertidumbre inicial, sólo queda sitio para disfrutar de uno de los mejores años de tu vida. Ya sin la presión de tener que sacar buenas notas, conociendo a muchísima gente nueva, haciendo actividades de todo tipo… Realmente, no se equivocan aquellos que recuerdan sus años universitarios con especial cariño. DIARIO Bahía de Cádiz
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