CARTA AL DIRECTOR enviada por: Jaime Morillo Caraballo, de Jerez
Me duele Jerez, me duelen sus calles, me duelen sus gentes, me duele ver tanto negocio cerrado, me duele ver tanto comercio emblemático cerrado, me duele ver su centro repleto de carteles de Se Alquila o Se Vende, me duele ver a los comerciantes en las puertas de sus negocios con la mirada ausente esperando al cliente que no llega. Pues me duele ver ese centro comercial enorme que destruye el negocio de barrio, me duele sus bodegas cerradas, me duele su fábrica de la botella cerrada, me duele su silencio, me duele su olvido.
También me duelen sus políticos tanto los que robaron como los que robaran, me duele su incompetencia, me duele su desidia, me duele las plazas vacías ante llenas de niños jugando a la pelota ahora solo habitadas por hombres y mujeres desamparados mendigando un trozo de pan alzando sus manos, como en una oración, pidiendo algo de caridad y cada día son más. Me duele asistir a funerales de gente joven que no vieron ninguna salida y huyeron a otros mundos.
Pero lo que más me duele es su juventud sin futuro, me duele que no emitan ni una queja ahogada, me duele ver sus ojos, en los cuales ya no hay brillo de esperanza, me duele la dignidad que nos han quitado, me duele ver a todos mirando una pantalla de teléfono en vez estar luchando, gritando y cambiando este mundo. Me duele porque dentro de poco pierdo mi trabajo, me veo con 31 años y sin opciones a una vida digna, me veo dependiendo de mis ancianos padres, me duele porque no sé si tendré algún futuro aquí y no duermo. Me dijeron que si era trabajador y honrado saldría a flote pero ahora veo que es mentira, que este mundo no funciona así y por eso me duele, me duele, me duele…
