El Ayuntamiento de Cádiz ha dado el visto bueno a la licencia de obra, solicitada por la Zona Franca de Cádiz el pasado 8 de enero, para la parcela de la antigua Ibérica Aga, en donde se plantea el proyecto Zona Base Cádiz que ansía convertir dicho espacio en un centro de innovación y expansión tecnológica consistente en la instalación de contenedores marítimos para empresas innovadoras de alto valor tecnológico.
La delegada del Estado de la Zona Franca de Cádiz, Victoria Rodríguez (colocada por el PSOE), ha celebrado este paso pero a la vez ha reclamado al Consistorio “mayor celeridad” en este tipo de trámites. En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz confía en que futuras licencias para el desarrollo del recinto exterior “se hagan con más agilidad, porque si cinco meses es mucho tiempo para una administración, mucho más lo es para un empresario que depende de los tiempos de la burocracia para poder empezar a generar beneficios y empleo”.
Ante esta queja pública, la administración municipal no se ha quedado callada. El concejal de Urbanismo en funciones, Martín Vila, ha mostrado su sorpresa, y recuerda que el Ayuntamiento “lleva ocho meses esperando a que presenten el proyecto de reparcelación para la parcela de la antigua Ibérica Aga”.
Asimismo, se detalla que el plazo de trámite para esta licencia de obras ha estado condicionado porque el edificio es Bien de Interés Cultural (BIC) y debe pasar por Comisión Provincial de Cultura, cuyos plazos son de tres meses aproximadamente. Por ello, Vila lamenta el “desconocimiento” de la Zona Franca, a la que instan a retomar “la idea inicial de trabajar junto al Ayuntamiento tal y como se acordó en su momento (mediante la constitución de una oficina conjunta que incluyese al IFEF en las tareas de gestión, desarrollo y comercialización del polígono exterior) ya que Cádiz no puede ser rehén de intereses partidistas”.
Añade que se tratan de “obras de ornato y adecentamiento y aún estamos esperando desde hace ocho meses a que presenten el proyecto de reparcelación”. Desde el Consistorio aseguran que buscarán “todas las soluciones y pondremos todas las facilidades, pero la propietaria del 50% de la parcela que es la Zona Franca tiene que presentar el proyecto de reparcelación. De esto ya se habló en la reunión de trabajo que mantuvimos hace ya ocho meses, pero no hay nada presentado”.
LAS PRIMERAS OBRAS
La Zona Franca ya adjudicó en abril la ejecución de estas primeras obras de adecentamiento y conservación de esta parcela a Gyocivil, que será la encargada de la actuación por unos 370.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses.
Esta actuación busca el adecentamiento de la parcela y obras de conservación del edificio administrativo en la UE-ZF-08 en el polígono exterior, e incluye la ejecución de los trabajos necesarios para el desarrollo del proyecto mencionado; el plan de seguridad y salud; el control de calidad; las primas de los seguros que deben contratar; los trabajos de acometida y extensión de los servicios que pudieran resultar necesarios; la tramitación, legalización, alta y puesta en marcha de las instalaciones, gastos por servicios afectados.
De esta forma, la obra preparará la parcela y creará el espacio productivo en donde se asienten los contenedores marítimos que acojan a esas potenciales empresas innovadoras y tecnológicas, “y que convertirá el lugar en un centro de innovación y expansión tecnológica”.
En paralelo a todos los trámites administrativos se está llevando a cabo el trabajo de precomercialización, que ha incluido la instalación de un contenedor piloto en la plaza del Melkart del recinto fiscal y que recrea lo que es una oficina tipo de las que irán instaladas en la parcela.
Zona Base también quiere ser el primer eslabón de la recuperación del polígono exterior de la Zona Franca de Cádiz que la actual delegada del Estado dice haberse tomado como prioridad, y servirá de experiencia piloto para el resto del polígono y referente para la innovación y el desarrollo.
