El alcalde de Puerto Real se ha puesto en contacto con varias autoridades de la Junta y el Ministerio de Medio Ambiente para que busquen una “solución definitiva” a los problemas de inundación de la barriada del Meadero de la Reina cada vez que llueve de forma importante. En los últimos días el Consistorio, pese a no ser su competencia, debió actuar en la zona con urgencia para evitar males mayores.
El alcalde de Puerto Real, Antonio Romero, se ha puesto en contacto con varias autoridades de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Medio Ambiente –en concreto, con la Dirección General de Planificación y Gestión del Dominio Público Hidráulico, la gerencia provincial de la Agencia de Medio Ambiente y Agua, la delegación territorial de Medio Ambiente, la Demarcación de Costas y el Parque Natural Bahía de Cádiz- para que busquen una “solución definitiva” a los problemas de inundación de la barriada del Meadero de la Reina cada vez que llueve de forma importante.
“Se está poniendo en riesgo de una nueva inundación a los vecinos del Meadero”, ha insistido el primer edil de Sí se puede Puerto Real, recordando que la pasada semana el Ayuntamiento debió actuar con rapidez, abriendo una pequeña gavia en uno de los muros de la salina anexa a la barriada para que el agua no se siguiera acumulando en el entorno.
Romero reitera en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “el Ayuntamiento ha actuado a pesar de que no es su responsabilidad, y en estos tiempos en los que se nos reitera continuamente a las administraciones locales la racionalización y sostenibilidad en las competencias que ejercemos, en los momentos de urgencia sólo estamos nosotros para atender los problemas que afectan a los ciudadanos, a pesar de todos los avisos y advertencias hechas por nuestra administración”.
En el informe realizado al respecto por el arquitecto municipal, se recoge que las obras constantes de transformación topográfica para salinas, ocupación y construcción desordenada del suelo, reparación y elevación de la A-4, han sido una barrera cada vez mayor a las aguas pluviales, dirigiéndolas y concentrándolas hacia un estrangulamiento, sobre el acceso al descansadero y discurriendo lenta y dirigidas hacia las marismas bajas interiores que desaguan por el caño del Zurraque.
La solución, según este mismo informe, pasa por la limpieza del canal de evacuación y la reconstrucción de la presa y tubos unidireccionales, y en un segundo momento, la canalización del arroyo de Guerra hasta el caño de Zurraque, que impida el desborde y acceso libre de las aguas al Meadero de la Reina, en condiciones excepcionales de lluvia, como las de los últimos días.
“Hemos reiterado muchas veces que la obra que se hizo en la salina en su momento no es suficiente y en las recientes lluvias se ha demostrado. La administración competente debe llegar a un acuerdo con el salinero para que den una solución definitiva a este problema”, repite Romero.
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