Andalucía es la segunda comunidad autónoma de España con mayor número de dentistas colegiados registrados. Entre los problemas de salud bucodental habituales, se incluyen la sensibilidad dental y las caries, que también pueden afectar a los dientes de leche.
Mantener una buena higiene oral es fundamental para evitar esta clase de patologías que tanto desgastan el esmalte de las piezas dentales. A continuación, explicamos como eliminar el sarro de los dientes un paso fundamental para preservar en buenas condiciones las estructuras dentales-
El sarro, una forma evolucionada de placa bacteriana
Durante la alimentación, parte de los alimentos queda adherida a los dientes, especialmente entre estos y las encías. Al comer, parte de los alimentos se queda adherido a los dientes, concretamente entre estos y las encías. La acumulación de residuos orgánicos en esta área conduce a la aparición de la placa bacteriana, una sustancia pegajosa (generalmente, amarillenta) producida por las bacterias presentes en la boca.
Esto hace que la formación de placa bacteriana sea inevitable; sin embargo, el desarrollo del sarro puede prevenirse. Cuando, después de comer, la placa no ha sido eliminada de la boca con un cepillado de dientes adecuado, esta capa de restos de comida y bacterias se endurece al contacto con la saliva, dando lugar así al sarro.
La acumulación de sarro produce caries
El sarro es el resultado de un proceso que las bacterias de la boca realizan de forma natural. Estos microorganismos convierten los carbohidratos (especialmente, el azúcar y el almidón) en ácidos que atacan el esmalte de los dientes.
En los casos más graves, es posible que las caries (producidas por la acumulación de sarro y placa bacteriana) perforen las piezas dentales, ocasionando así su pérdida.
Suprimir el sarro eficazmente desde casa
Prevenir el sarro es la medida más eficiente que se puede adoptar; algo que puede lograrse con unos sencillos pasos:
1. Teniendo en cuenta que la placa bacteriana se genera al cabo de 20 minutos después de haber comido, conviene cepillar los dientes en un tiempo no superior a éste.
2. Los dentistas aconsejan lavarse los dientes tres veces al día (o al menos dos) durante unos tres minutos.
3. En el proceso de cepillado, la persona debe desplazar el cepillo por la superficie completa de sus dientes, incidiendo con suavidad y precisión en la unión entre el diente y la encía, sin olvidar limpiar la parte trasera de cada pieza.
La prevención del sarro requiere una rutina de higiene constante y hábitos saludables que ayuden a mantener una sonrisa sana. Recuerda que una correcta higiene bucal no solo protege tus dientes, sino que también mejora tu salud general.
