Una colección de obras de alumnos de la Escuela de Arte de Cádiz ha inaugurado, con la muestra ‘Organicismo’, un nuevo espacio expositivo en Cádiz, el del rehabilitado Baluarte del Orejón, en lo que fue el antiguo Club Marte, en la denominada Puerta de la Caleta. La exposición permanecerá abierta por las mañanas hasta el 30 de septiembre.
Una colección de obras de alumnos del ciclo Formativo de Grado Superior de Cerámica de la Escuela de Arte de Cádiz ha inaugurado, con la muestra ‘Organicismo’, un nuevo espacio expositivo en Cádiz, el del rehabilitado Baluarte del Orejón, en lo que fue el antiguo Club Marte, en la denominada Puerta de la Caleta.
La concejala de Cultura, Eva Tubío, ha asistido a la inauguración de la exposición colectiva en la que participan María Jesús Aguilera, Juan Aznar, María Carmen Campe, María Carmen Hernández, María José Jiménez, Ana Ortiz, Isabel Páez y Paola Pérez.
Durante el acto, Tubío ha agradecido la colaboración de la Escuela de Arte, en especial la de los profesores Basilio Ballesteros y Raquel Montero, en la organización de esta muestra “con la que se pretende promocionar al alumnado y por tanto a la artesanía gaditana”, se remarca en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
La misma está formada por una serie de piezas, inspiradas principalmente en el entorno marino de la playa gaditana, y abarca un gran número de técnicas tanto en baja como en alta cocción. Recoge también algunos proyectos integrados correspondientes a la última promoción de graduados en la Escuela. Permanecerá abierta hasta el próximo 30 de septiembre y podrá visitarse sólo en horario de 11 a 13 horas.
Se trata de la primera exposición que se organiza en el Baluarte del Orejón, antes Club Marte, después de que se rehabilitara y remodelara a cargo del último Plan Urban y sus fondos europeos. Estos trabajos comenzaron a finales de noviembre, después de que el actual equipo de Gobierno tuviese que adaptar el proyecto existente dado que contaba con el rechazo de la Comisión de Patrimonio de la Junta de Andalucía al estar el baluarte protegido por distintas afecciones como ser entorno de un Bien de Interés Cultural (BIC) como el Balneario de la Palma, de la de Costas, o por su inclusión en el catálogo de Patrimonio Arquitectónico.
El proyecto inicial contemplaba la construcción de una primera planta que Patrimonio rechazó por su impacto visual y por no adaptarse al diseño original del baluarte. Finalmente, tras los cambios hechos en el presente mandato, los trabajos consistieron en una remodelación de la planta baja, de la zona más cercana a la Caleta, con el objetivo de ejecutar una segunda fase más adelante. Se invirtieron 65.500 euros.
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