El CEIP Celestino Mutis de Cádiz ha celebrado su primera Semana Bilingüe, con diversos actos en los que se daba a conocer a los escolares aspectos de la cultura anglosajona. Al respecto, la Ampa del centro se muestra “perpleja” por la visita estos días del delegado territorial de Educación, cuando “ha dejado este año al colegio sin auxiliar de conversación nativo en el proyecto bilingüe”.
El CEIP Celestino Mutis de Cádiz celebraba hace unos días su primera Semana Bilingüe, con diversos actos en los que se daba a conocer a los escolares aspectos de la cultura anglosajona. Este colegio público se ha distinguido por su trabajo en promover la multiculturalidad y fue pionero en la implantación de los programas bilingües en Cádiz, recuerdan desde la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (Ampa).
A finales de semana, el delegado territorial de Educación de la Junta en Cádiz, Juan Luis Belizón, participaba en alguno de estos actos “acompañado por un séquito de periodistas”, y resaltaba que en la provincia “hay 130 centros bilingües y el año que viene se incorporarán siete más. Habrá aproximadamente 40.000 niños inmersos en programas de bilingüismo y en algunos casos, de plurilingüismo”.
Con todo, la Ampa se muestra “perpleja” por esta visita, señalando en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz que “todo puede parecer normal, si no fuese por el hecho que esta misma delegación de Educación ha dejado este año al Celestino Mutis sin auxiliar de conversación en inglés, una herramienta fundamental para el éxito del programa, alegando razones burocráticas”. Y agrega que este mismo problema lo han tenido otros centros bilingües de la capital, como el Carola Ribed. La asociación de padres asegura que solicitó una reunión a Belizón en septiembre de 2015, para tratar diversos problemas que sufre el colegio, entre ellos precisamente el tema del auxiliar de conversación: “a fecha de hoy, ni siquiera se han dignado en responder a nuestra solicitud”.
Para la Ampa, este hecho, “más allá de la simple anécdota”, demuestra “la actitud de los responsables de nuestra educación pública, sean del color político que sea”. “Se les llena la boca hablando de educación pública, pero asisten impasibles a su deterioro. Apelan al compromiso de las familias, pero desprecian y ningunean a las familias y a sus representantes. Se les hincha el pecho afirmando que ‘nosotros no recortamos’, pero en los últimos años no hemos dejado de sufrir recortes en los servicios educativos”, se relata.
Y se insiste en que “algunos son recortes directos, como la reducción hasta lo exiguo del presupuesto de los centros, o la disminución de las partidas consignadas para los servicios de comedores escolares, que hacen que sólo grandes multinacionales y empresas de catering puedan acceder a estos concursos, ofreciendo un servicio en general de pésima calidad”. Además, hace unos años “hablaban de promover entre nuestros hijos e hijas el uso de las nuevas tecnologías. Hoy apenas arrancan los pocos y obsoletos ordenadores que quedan en los centros. Otros recortes están más encubiertos, como el retraso en la cobertura de las bajas de los profesores o en la oferta de algunos servicios educativos, como las escuelas deportivas”.
Para estos padres, la escuela pública “necesita mejores responsables que los actuales”.
EL AYUNTAMIENTO RESERVA 65.000 EUROS PARA MEJORAS
Por otro lado, sin dejar este colegio público, el Ayuntamiento de Cádiz, a través del área de Urbanismo, anunciaba a principios de mes que ha finalizado el proyecto de reforma varias en el centro, que saldrá a licitación una vez se hayan aprobado los presupuestos de 2016.
El edil de Urbanismo, Martín Vila, apuntaba que la elaboración de este proyecto responde a una demanda “de hace años” por parte de la dirección del centro y de la Ampa, que venían reclamando la ejecución de mejoras en el colegio, para que los alumnos de la escuela pública disfruten de instalaciones en las mejores condiciones.
Con un presupuesto de algo más de 65.000 euros y un periodo de ejecución de dos meses, se contempla la renovación del patio actual del colegio situado en la planta baja con acceso directo desde la calle, tanto de sus cerramientos como del pavimento, así como la habilitación de la cubierta para su uso como patio de recreo, de forma que el alumnado en horas de descanso pueda repartirse.
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