JORNADA 40. Desangelado ambiente en A Malata este domingo, en horario antifútbol, para ¿disfrutar? un partido intrascendente entre el Racing Club Ferrol ya descendido a Primera Federación, y un Cádiz salvado (salvo machada del Eldense…) que sigue navegando (y naufragando) en la nada más absoluta, con directiva, jugadores y afición deseando que acabe esta interminable gris temporada, mientras resuenan los rumores y debate alrededor del fichaje de Suso, y de su conveniencia.
En la previa del choque, Gaizka Garitano reflexionaba sobre este insulso remate de curso para los gaditanos: “ahora mismo nos centramos en intentar quedar lo más arriba posible, y acabar bien. Ya veremos en estos 15 días qué es lo que hacemos a nivel de alineaciones, ya iremos viendo cómo van los partidos. Ahora jugarán los futbolistas que más enchufados están, que mejor llegan a final de temporada y que más ganas tienen de jugar y de demostrar que podemos seguir ganando, que para mí eso es muy importante”.
Así, más allá de las bajas consabidas de David Gil (que acaba de pasar por quirófano) y de Chris Ramos, los amarillos salían al verde con Caro, en la portería; Iza, Climent, Kovacevic y Chust, en defensa; Álex Fernández y Alcaraz en el centro del campo; De la Rosa y Ocampo en los extremos, con Sobrino y Roger Martí como hombres más adelantados.
Un disparo de Nacho que se iba por encima de la portería cadista, y al otro lado un lanzamiento sin ángulo de Brian Ocampo que se topaba con los puños de Jesús Ruiz, ponían algo de salsa en el inicio de un partido sin orden ni concierto. Aunque la acción más peligrosa llegaba en el minuto 14, gracias a un error grosero de Kovacevic que permitía al delantero plantarse con todo a favor, y fallar.
Mientras el espectáculo en el verde evidenciaba la situación deprimente de ambos equipos, el partido se detenía unos minutos pasado el 30 por una incidencia en la grada, donde era atendido un aficionado. Y de ahí hasta el pitido que marcaba el descanso, más gruñidos estomacales y hambre que ganas de fútbol (amago de fútbol profesional, claro…) ¿Qué hay de comer?
“LA CALIDAD QUE SE NOS PRESUPONE NO LA TENEMOS”
Superadas las tres de la tarde, vaya horitas para trotar detrás de una pelota y con motivación cero, se iniciaba una segunda mitad igual de sin-sentido que la primera, ya con Melendo en el campo por De la Rosa. A lo largo de este periodo se incorporarían también por el bando visitante Carlos Fernández, Diakité y Matos, por Sobrino, Alcaraz y Ocampo.
El Cádiz por momentos parecía más despierto, mostrando hasta cierta intensidad. En esos fogonazos llegarían varias acciones de Rubén Sobrino, topándose con el portero Jesús Ruiz, o bien disparando alto. E incluso en el minuto 69 Roger Martí la estrellaba en el larguero.
Sin embargo, este desatino subía de nivel con una mano de Víctor Chust dentro del área que, sin dudarlo, era sancionado por el árbitro con penalti. Y en el 80, Chiki ponía por delante a los gallegos en el marcador.
Los de Garitano pudieron empatar cuatro después, con otro palo de Roger, que en el rechazo no supo mandar entre los tres palos Carlos Fernández, aunque al parecer estaba en fuera de juego. E igualmente, la sentencia del Ferrol pudo llegar en el descuento, con un mano a mano del excadista Álvaro Giménez que abortó bien Caro. ¿Nos ponemos ahora el Eldense…?
“Ha sido una derrota jodida para nosotros, no tengo muchas ganas de hablar. La calidad que se nos presupone no la tenemos, nos cuesta mucho con balón. Dependemos mucho de hacer gol primero. Y en ese penalti tonto ha llegado el 1-0. No quiero poner ninguna excusa con esta derrota”, apuntaba el técnico vasco en el postpartido, con casi la misma cara de hartura y abatimiento que el aficionado cadista medio, que tiene asumido que todo seguirá igual con lo que hay.
Y terminaba Gaizka Garitano rebatiendo eso de que este equipo ya no se juega nada: “yo me juego la vida, así me lo tomo como profesional, aunque en el campo no lo hayamos demostrado”. Y así van ya cuarenta jornadas, y gran parte de la pasada temporada en Primera. DIARIO Bahía de Cádiz