La alcaldesa ha presentado el nuevo pliego de parques y jardines, que se va a licitar por 9 millones, frente a los 5,2 millones de la última adjudicación a punto de caducar. Se apuesta por el cuidado de más zonas verdes, por la digitalización y tecnificación, y la mejora de condiciones de la plantilla.
El servicio privatizado de mantenimiento de parques y jardines de San Fernando está en manos de la firma Recolte desde septiembre de 2018 (por más de 1,3 millones de euros al año, un 35% más de lo que se gastaba con la anterior concesionaria); un contrato por cuatro años que caduca este 2022. Y en este punto, el Ayuntamiento tiene ya listo el nuevo pliego, que tras pasar por Junta de Gobierno Local se sacará a licitación.
En resumen, el futuro contrato quiere contribuir al “compromiso con la sostenibilidad” que dice tener el actual Gobierno local de PSOE y Ciudadanos (aunque la oposición no lo vea así, como han denunciado semanas atrás por ejemplo Podemos o Izquierda Unida), al tiempo que apuesta por la digitalización y tecnificación y por la mejora de las condiciones de la plantilla. Y todo ello con un notable incremento de la dotación presupuestaria. El servicio se va a licitar por más de 9 millones (por cuatro años), frente a los algo más de 5,2 millones que supone la concesión actual por el mismo plazo.
A decir de la alcaldesa Patricia Cavada, su bipartito está obsesionado con la mejora de los servicios públicos, especialmente de aquellos que afectan a la imagen y a la regeneración de los espacios urbanos, ya que “una mayor calidad urbana es sinónimo de más atractivo, y de economía y generación de empleo”.
“una mayor calidad urbana es sinónimo de más atractivo, y de economía y generación de empleo”
“San Fernando debe ser una ciudad verde. Estamos convencidos de ese compromiso con la sostenibilidad, y además esas son las directrices que marcan Naciones Unidas, la Unión Europea y el Gobierno de España”, ha llegado a decir la primera edil socialista en la presentación de este pliego, junto al concejal de Desarrollo Sostenible, Ignacio Bermejo. “Vamos a seguir planificando nuevas infraestructuras verdes, porque el objetivo que nos hemos marcado es duplicar la ratio de metro cuadrado verde por habitante, y pasar de 5 a 10 metros cuadrados por cada isleño”, ha reiterado. Hace un año, se afirmaba que la localidad cuenta con 7 m2 de zona verde por vecino.
Así, ha añadido, el nuevo contrato de parques y jardines “tenía que dar respuesta a ese incremento de las zonas verdes, y al compromiso con la sostenibilidad y con su carácter de ciudad verde”. Por ello, se va a licitar este goloso servicio por 9 millones de euros para cuatro años, “lo que supone un 65% por encima del coste actual”. Esta cantidad también duplica la que se destinaba a este servicio privatizado cuando el PSOE llegó a la Alcaldía en 2015 (entonces se gastaba al año en zonas verdes unos 800.000 euros).
NUEVO MODELO DE GESTIÓN
Con este nuevo pliego, como parece obvio por su inversión, se contempla la renovación de toda la maquinaria del servicio y su incremento, “avanzando hacia unos vehículos modernizados y más sostenibles”.
También apuesta por la transformación digital y la innovación, con el fomento de la telegestión del riego automático y la digitalización de las prestaciones, según se recoge en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz. Esta digitalización “fomentará la mejora del control de los servicios, la reducción de la huella de carbono y la optimización del consumo de agua, así como la mejora de calidad general de las zonas verdes y el embellecimiento urbano”.
Por otro lado, se plantea un sistema de vegetación “más adecuado” para la lucha contra el cambio climático y para crear sumideros de CO2.
Del mismo modo, el nuevo contrato espera mejorar el control y seguimiento de la evolución del servicio y la evaluación de la calidad mediante un sistema de indicadores. Y se consolida los servicios de mantenimiento en los centros escolares
Finalmente, contempla una mejora de las condiciones de la plantilla con incremento de jornales, y un aumento del personal, aunque no se concreta el número; y propiciará la adaptación salarial al nuevo convenio estatal del sector. De la misma forma, se modificarán las condiciones laborales para la mejora de la calidad de los servicios, “ya que se reduce el ratio de zona verde que debe atender cada empleado gracias al incremento de plantilla previsto”.
