CARTA AL DIRECTOR enviada por: Fernando González Meléndez (periodista venezolano exiliado en España)
Muchos dirán que el reciente debate de los candidatos a la presidencia del Gobierno en España, ha ayudado a despejar unas cuantas dudas, sobre todo, a la hora de las llamadas alianzas tras el futuro resultado electoral del 26-J.
Resulta irónico, que tras las pasadas elecciones de diciembre, en donde ganó claramente el PP, los que perdieron, se dedicaron a conspirar para sacar del poder a quien legítimamente ganó las elecciones, y a pesar de esa clara intención “golpista”, la sociedad española, parece que lo ve con mucha normalidad. Pero en mi opinión, yo no veo nada normal, que los perdedores se unan, sin el apoyo, y a espaldas de quienes les eligieron, para despojar del poder, a quien si fue electo legítimamente, para el cargo de presidente de Gobierno.
Por ejemplo, imagínese a un votante de Podemos, que ve con estupor, que su líder, el señor Iglesias, grita a los cuatro vientos que desea pactar con la “casta” socialista que representa el señor Sánchez, con la condición, de que el PSOE, le deje la vicepresidencia de Gobierno, y los sillones ministeriales más importantes, a Podemos.
Y viceversa, ocurre con que los votantes del PSOE, cuando ven con asombro, que su líder, el señor Sánchez, haga toda clase de intentos por llegar a un acuerdo con Podemos.
Y si a ello, se suma, que Ciudadanos dio tras las pasadas elecciones su apoyo al perdedor señor Sánchez, menos los votantes del “naranjito” entenderán ese apoyo.
No entiendo, como los votantes de Podemos, Ciudadanos, o el PSOE, vean este tipo de acuerdo “golpista” como algo normal. O a caso, a esos votantes, les da igual, lo que hagan sus máximos líderes con sus votos.
Bueno… creo que en el en caso del PSOE, esa política de alianza con Podemos, le ha pasado factura, ya que las encuestas les colocan hoy en tercer lugar, y cuidado, que tras lo visto en el último debate, pueden bajar al cuarto puesto, o peor aun, terminar como sus colegas socialistas del PASOK en las últimas elecciones en Grecia de 2015, en donde el PSOE griego, ocupó la sexta posición.
En el último debate del 13-J, el señor Pedro Sánchez se dedicó a recordar su desengaño amoroso con Pablo Iglesias; y Pablo Iglesias, se dedicó a recordarle al señor Sánchez, que él, aun le quiere, pero eso si, con la única condición inviolable, de que el señor Iglesias, y sólo él, debería ser el presidente, y vicepresidente de Gobierno, tener todos los ministerios, nombrar a todos los jueces, colocar en altos cargos a sus familiares, amantes y amigos (como han hecho en Madrid y Barcelona); y a partir de allí, desarrollar el gran proyecto “revolucionario Bolivariano” de gobernar juntos con su aliado ideológico y financiero, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Espero que hoy, al alertar de los peligros del populismo en España, la gente, en alguna medida, no contribuya indirectamente con su voto, al acuerdo “golpista” de PSOE-Podemos. DIARIO Bahía de Cádiz
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