El Tricentenario del traslado desde Sevilla a Cádiz de la Casa de Contratación de Indias, previsto en 2017, ya es, formalmente, un “objetivo compartido”. Y además, con su logotipo y todo. Los diferentes niveles de la administración pública y de “distinto pensamiento político”, instituciones académicas y entidades empresariales se han hecho la foto suscribiendo un protocolo que establece las directrices básicas de la efeméride y la voluntad de desarrollar una “agenda única” de actividades; un paso significativo para que no ocurra como con el Bicentenario de la Constitución de 1812. Todas las partes entienden que recordar esta fecha desde la “unidad” puede “abrir nuevas oportunidades de desarrollo económico” para la provincia.
La conmemoración del Tricentenario del traslado desde Sevilla a Cádiz de la Casa de Contratación de Indias, prevista en 2017, ya es, formalmente, un “objetivo compartido”. Y además, con su logotipo y todo. Los diferentes niveles de la administración pública -estatal, autonómico, provincial y municipal- y de “distinto pensamiento político”, instituciones académicas y entidades empresariales se han hecho la foto suscribiendo un protocolo que establece las directrices básicas de la efeméride y la voluntad de desarrollar una “agenda única” de actividades; sin duda, un paso significativo para que no ocurra lo sucedido en los prolegómenos de la pasada celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812.
El documento que promueve la Diputación –institución que se ha erigido como promotora de la conmemoración inicialmente- regula la constitución de dos órganos, el consejo institucional del Tricentenario y la comisión técnica de gestión; pero lo más relevante del acto de este miércoles ha sido la “reafirmación de la unidad” en torno a un acontecimiento que, en la teoría, “puede abrir nuevas oportunidades de desarrollo económico”. Una apelación a la suma de esfuerzos expresada por la presidenta de Diputación, Irene García; el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Jiménez Barrios; y el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz.
El protocolo firmado permite la adhesión de nuevas entidades y reconoce el protagonismo de las asociaciones y colectivos de la denominada sociedad civil para la incorporación de propuestas que fortalezcan la celebración, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz.
En este acto se ha agradecido además el trabajo desempeñado por el diputado provincial Fran González, quien desde el pasado mes de abril está presentando el supuesto “alcance” de esta efeméride a algunas instituciones públicas y entidades privadas. Una proyección que ha permitido de momento la plasmación de este primer protocolo “y una sólida alianza para desarrollar una agenda de actividades conjunta”.
Además de García, Sanz y Jiménez Barrios, también han suscrito el documento los siguientes representantes: los alcaldes de Cádiz, El Puerto, Chiclana, Puerto Real, Rota y Sanlúcar, José María González ‘Kichi’, David de la Encina, José María Román, Antonio Romero, Javier Ruiz Arana, y Víctor Mora, respectivamente (también estaba convocada la alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, que prefirió asistir a un acto en La Isla con el consejero de Empleo); el rector de la Universidad de Cádiz, Eduardo González Mazo; el presidente de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, José Luis Blanco; el delegado del Estado de la Zona Franca de Cádiz, Jorge Ramos; el presidente de la Cámara de Comercio de Cádiz, Ángel Juan; y el presidente de la Confederación de Empresarios de Cádiz, Javier Sánchez Rojas. También excusó su ausencia el Almirante de la Flota.
“MIRAMOS EL PASADO, PERO SIN NOSTALGIA, SÓLO PARA COGER IMPULSO”
La presidenta de la Diputación, Irene García, entiende que este aniversario plantea un “reto” para la provincia: recuperar su centralidad, la misma que tuvo hace 300 años cuando la capital gaditana fue el nexo de las operaciones comerciales entre Europa y América: “la historia nos ha regalado este momento para que nosotros, a pesar de los tiempos convulsos, luchemos por ofrecer un tiempo de ilusión con nuevas posibilidades de empleo y desarrollo económico. Miramos el pasado, pero sin nostalgia, sólo para coger impulso”.
Por su lado, el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, manifestaba su satisfacción al proyectarse una imagen de unidad más allá del ámbito de las instituciones y sus posiciones políticas. “Que hoy estemos todos aquí es un buen mensaje”, expresó el también consejero de Presidencia, “y ahora debemos analizar lo que cada uno debe hacer y ponerlo al servicio del bien común”.
A decir del consejero socialista, esta conmemoración “simboliza un acontecimiento de la propia ciudad como plataforma para expresar lo que significa Cádiz, lo que significó y lo que queremos que signifique”. Una celebración que recordará una etapa histórica en la que Cádiz “se convierte en un emporio económico importante y, al mismo tiempo, brillan las ideas, la cultura y el pensamiento lo que hace que tenga un esplendor en el mundo”.
Y el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, también valoró la “unidad de acción”, que debe permitir “el desarrollo de las grandes potencialidades de esta provincia”. Aludió a otros ejemplos de concertación, como es el caso de la Inversión Territorial Integrada (ITI de Cádiz) o el demorado macropolígono de Las Aletas, que sigue siendo un mero proyecto.
“Hoy, casi 300 años después –añadía el representante del Gobierno de Rajoy-, Cádiz ofrece realidades que confirman e impulsan el progreso económico y social”, y ha propuesto que el reto es situar a la provincia gaditana como “el referente andaluz de la salida de la crisis, de la creación de empleo y de la expansión de su modelo productivo”. En este sentido, ha hecho un llamamiento para que todas las administraciones remen en la misma dirección, apartando los localismos, porque, a su juicio, “una provincia unida, es una provincia con empleo”.
El líder de la derecha gaditana ha incidido asimismo en “sumar esfuerzos y multiplicar voluntades” para “dar un nuevo impulso a Cádiz como plataforma logística del Sur de Europa” y “seguir diversificando” el modelo productivo de la provincia.
LA MARCA DEL TRICENTENARIO
En el acto celebrado en la Diputación también se ha mostrado el logotipo que basa la imagen corporativa de la efeméride, diseñado por la firma Ideologo.com. Pedro Álvarez y Raúl Reguera explicaron las motivaciones de la marca que fue elegida -entre otras propuestas- por un jurado compuesto por representantes de la propia Diputación, Universidad de Cádiz, Cámara de Comercio, Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Cádiz y Subdelegación del Gobierno.
“Líneas discontinuas que recrean una carta náutica, o las trazas de un singular mapa del tesoro, contribuyen a realzar el dinamismo y la evolución de Cádiz, su papel de nudo en el que convergen Europa y América y el equilibrio entre sobriedad y luminosidad”, es la explicación de este logo.
LA DIPUTACIÓN, “EJE IMPULSOR” DE LA CONMEMORACIÓN
La Diputación defiende que adopta un papel de “eje impulsor” de este proyecto debido a que el actual Palacio Provincial, que fue sede del Palacio de Aduanas, y que se construyó para tal ocasión, es el principal patrimonio y reclamo simbólico de un histórico que coincidió con la época de mayor esplendor económico, comercial, cultural y social de la ciudad de Cádiz.
Un decreto de Felipe V, firmado el 12 de mayo 1717, supuso el traslado de la Casa de Contratación a Cádiz. La decisión responde a distintas causas de orden geográfico, económico y político. Se proyectaron tres edificios: uno para la Casa de Contratación, otro para el Consulado de Mercaderes y otro para la Aduana, el único de nueva planta. Este hecho redundará en un mayor cosmopolitismo de la ciudad, como enclave estratégico en las relaciones entre Europa y América, y la transformará en buen campo de cultivo de las ideas liberales de la Ilustración que se plasmaron en el ideario de las Cortes de 1810.
La Casa estuvo en Cádiz durante 73 años, ya que en 1790 se suprime la institución, que se estableció en 1503 para fomentar y regular el comercio y la navegación con los territorios españoles en Ultramar. De hecho, el decreto de libre comercio de 1765 supuso el primer paso hacia la liberalización de este comercio con otro puertos peninsulares.
La Diputación gaditana ha concretado en este documento inicial que ahora promueve las aspiraciones del proyecto, sus directrices básicas y un conjunto de actividades que deberá fortalecerse mediante el consenso con las entidades participantes. Se plantean conferencias y actividades divulgativas, muchas de ellas diseñadas para la comunidad escolar. No faltará una exposición con la que se podrá ilustrar la etapa de mayor esplendor de Cádiz y las posibilidades de reeditar ese papel protagonista.
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