La nueva ordenanza municipal de Tenencia de Animales del Ayuntamiento de Cádiz entró en vigor el pasado mes de mayo, tras superar los trámites pertinentes como su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP). A colación, el Consistorio ve oportuno recordar que dicha ordenanza establece una serie de normas para los animales de compañía en las vías y espacios públicos que, en caso de no cumplirse, puede suponer multas económicas.
Entre esas normas se encuentra la prohibición de que los perros miccionen “sobre mobiliario urbano, especies vegetales, edificios y vehículos, quedando exclusivamente permitido en zonas habilitadas y sobre el viario público no restringido”. Y asimismo, la persona que vaya acompañada de un can deberá ir provista de “una botella con agua jabonosa para minimizar el efecto de las micciones”.
Preferentemente, las personas propietarias de los animales utilizarán los parques caninos habilitados para la satisfacción de las necesidades fisiológicas de éstos, siguiendo estrictamente las normas de uso expuestas a la entrada de éstas áreas, recoge la ordenanza. E igualmente se señala que para evitar las micciones de animales “sólo estarán permitidos los repelentes debidamente registrados y autorizados para dicho fin”.
En ese mismo artículo 10 de la ordenanza municipal se especifica también que la persona que lleve al animal “queda obligada a la recogida de las defecaciones en las vías y espacios públicos de forma inmediata, asimismo queda obligada a portar bolsas de plástico para este fin”. La Policía Local podrá requerir a la persona que conduzca el perro o sea propietaria, para que proceda a retirar las deposiciones del animal “de manera higiénicamente aceptable mediante bolsa impermeable en las papeleras o contenedores, sin perjuicio de la tramitación de expediente sancionador”.
Desde el Consistorio gaditano se insiste en que la colaboración y la responsabilidad de todas las personas dueñas de perros es “primordial” para mantener limpia la capital, y estas medidas recogidas en la reformulada ordenanza de Tenencias de Animales “van encaminadas a una mejora de la limpieza de la ciudad”.
Al respecto, el Ayuntamiento recuerda que tiene previsto habilitar nuevos parques caninos. Ya se ha aprobado la instalación de un parque en el paseo de Santa Bárbara, aprovechando uno de los inmensos parterres, que apenas tiene uso y que cuenta con una superficie de 1.000 metros cuadrados. Y Procasa asume la instalación de otro en el barrio de Puntales.
Entre otros puntos de la ordenanza (completa AQUÍ) están el que señala que la persona que conduzca y controle perros potencialmente peligrosos en las vías públicas deberá ser mayor de 18 años y tendrá que llevar consigo la licencia administrativa que le habilita para la tenencia de animales potencialmente peligrosos y el documento autonómico de identificación y registro del animal (DAIRA) como perro potencialmente peligroso; que los perros de raza potencialmente peligrosa en las vías públicas llevarán bozal y cadena o correa no extensible e irrompible, de un metro de longitud máxima; y que queda prohibido bañar a los animales en duchas en playas, fuentes ornamentales, estanques y similares, así como que beban agua de las fuentes de agua potable de consumo público, salvo las habilitadas para ello.
