La artista aragonesa Eva Armisén, de trayectoria internacional, está muy presente en Cádiz este verano con su proyecto expositivo ‘Verano’, desplegado en tres puntos de la ciudad: en el Castillo de Santa Catalina, en los muros del mercado central y en la Galería Benot.
Con su inconfundible lenguaje, lleno de color, ternura y símbolos cotidianos, Armisén propone estos meses de calor “como pausa, como espacio emocional y mental donde detenerse, experimentar, respirar y reconectar”. Su propuesta en la capital gaditana invita a mirar con calma lo que a menudo pasa desapercibido: los vínculos, los rituales cotidianos, la belleza de lo simple, la intensidad de lo pequeño.
La exposición abierta en Santa Catalina, hasta el 14 de septiembre, reúne pinturas, esculturas y grabados recientes, e incluye las ilustraciones originales del libro ‘Mamá y el mar’, un homenaje a las Haenyeo, las legendarias buceadoras de la isla coreana de Jeju. Junto a estas obras, se proyecta un documental que narra la experiencia de la artista durante su convivencia con estas mujeres en la isla de Udo.
Pero ‘Verano’ se expande por otros dos puntos del casco antiguo con dos propuestas que refuerzan su carácter “abierto y participativo”: una intervención artística en la fachada exterior de la plaza, donde Armisén acerca su arte al día a día de vecinos y turistas; así como una exposición de obra gráfica en la Galería Benot, con la que la artista colabora desde hace años.
UNA MIRADA ÚNICA
Con este recorrido, “Cádiz se convierte en el escenario de una invitación a la contemplación y la alegría tranquila, tan propias del verano, a través de la mirada única de Eva Armisén”, recoge DIARIO Bahía de Cádiz de fuentes municipales.
Con una trayectoria cada vez más internacional, su obra ha pasado ya por ciudades como Seúl, Los Ángeles, Hong Kong Singapur, Lisboa, Taipei, Shanghai o Melbourne, llevando así su visión “íntima y esperanzadora” a públicos muy diversos de medio mundo.
El trabajo de Armisén se centra en plasmar la vida diaria y lo cotidiano como algo extraordinario, proponiendo “una mirada vital y optimista que nos traslada a un mundo habitable y lleno de emoción”.