La Policía Nacional ha detenido recientemente en Cádiz a un hombre por su participación en la venta al menudeo de cocaína, donde establecía contactos con los compradores por teléfono, el llamado servicio de ‘telecoca’. Días atrás, se detenía también en la ciudad, en la barriada de Guillen Moreno, a una mujer que se dedicaba a la venta de envoltorios de rebujito desde su propio domicilio, que apenas abandonaba sabiéndose vigilada por los agentes.
La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 38 años de edad por su presunta participación en la venta al menudeo de cocaína en la capital gaditana, donde establecía contactos con los compradores por teléfono.
Esta detención y otra realizada el pasado 22 de julio en la barriada de Guillen Moreno se enmarcan dentro de plan para erradicar el pequeño tráfico de estupefacientes en los barrios de Cádiz, donde agentes de paisano trabajan para detectar, identificar y detener a personas dedicadas al tráfico de drogas a pequeña y media escala.
La última intervención, según se ha informado a DIARIO Bahía de Cádiz, ha sido desarrollada por agentes de la Policía Nacional adscritos al Grupo Udyco I-Bahía de Cádiz de la Comisaría Provincial, los cuales dentro del dispositivo para la represión del pequeño tráfico de drogas con motivo de la Operación Verano sorprendieron en la tarde del pasado viernes día 7 en la calle Soleá a un individuo relacionado con el menudeo de cocaína cuando llevaba a cabo una transacción de varios envoltorios de dicha sustancia.
El ahora detenido, residente en la ciudad, utilizaba para ello el ‘modus operandi’ conocido como ‘telecoca’, contactando previamente con sus “numerosos” compradores a través del teléfono móvil para quedar en un lugar determinado donde llevar a cabo la transacción. Este fenómeno suele expandirse en verano por el aumento de fiestas y la llegada de turistas.
Ampliamente conocido por los investigadores policiales, fue detectado cuando circulaba por la Avenida Juan Carlos I en un ciclomotor de su propiedad, dirigiéndose a la calle Soleá, donde esperó la llegada de un vecino de la zona y tras establecer un breve contacto con el mismo, le hizo entrega de cuatro envoltorios de cocaína, al mismo tiempo que recibía por ello 100 euros. Todo ello fue observado a escasos metros de distancia por los policías actuantes que procedieron a su inmediata detención, siéndole intervenidos un total de 480 euros y además en el interior de su ciclomotor ocultaba una cajita metálica conteniendo otros cinco envoltorios de la misma sustancia estupefaciente.
Tras pasar el fin de semana en los calabozos de la Comisaría, fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de la ciudad de Cádiz, quien ante las pruebas incriminatorias aportadas por los investigadores decretó su ingreso en prisión preventiva.
OTRO DETENIDO EN GUILLÉN MORENO
En otra operación también en la capital, el pasado 22 de julio, fue detenida una mujer de 36 años de edad y residente en la barriada de Guillen Moreno, como presunta autora de un delito contra la salud pública. Se dedicaba a la venta de envoltorios de rebujito (mezcla de cocaína y de heroína) desde su propio domicilio, facilitando el acceso a su inmueble de los toxicómanos que posteriormente subían hasta su vivienda para adquirir las dosis diarias de dichas sustancias estupefacientes.
Fruto de las vigilancias a las que fue sometida por los investigadores, se interceptaron tres compradores a los que se les intervinieron varios envoltorios. A uno de consumidores se le intervino hasta 15 dosis.
La investigada al tener conocimiento del operativo desarrollado por la Policía al haber sido presumiblemente avisada por los toxicómanos, no abandonaba la seguridad su vivienda ante la certeza de que en la calle sería inmediatamente detenida. Aun así, continuó con su actividad ilícita “y prácticamente obligando a sus compradores a consumir las sustancias estupefacientes en su propio domicilio”.
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