El restaurante El Chato Las Canteras, de Puerto Real, acogía hace unos días una interesante tertulia organizada por la peña Cambio de Tercio, en la que participaban los novilleros Fran Gómez y Jorge Alba, junto al mayoral Francisco Orellana de la ganadería de María del Carmen Camacho, mantenida por Luis Rivas.
En el reabierto restaurante El Chato Las Canteras, de Puerto Real, ha tenido lugar hace unos días una interesante tertulia organizada por la peña Cambio de Tercio, en la que participaban los novilleros Fran Gómez y Jorge Alba, junto al mayoral Francisco Orellana de la ganadería de María del Carmen Camacho, mantenida por Luis Rivas del Grupo Información y Ser Cádiz.
Frente a un numeroso grupo de aficionados, Fran Gómez ha dado un repaso a su trayectoria desde sus inicios en la Escuela de San Fernando con 11 años, su debut en El Puerto la temporada de 2009, además de las muchas vicisitudes sufridas hasta la fecha como su ausencia en Sevilla tras cortar tres orejas de novillero, sus triunfos en El Puerto donde le pidieron dinero por torear, y en otras donde después de haber sido nombrado triunfador no han contado en años sucesivos con su presencia. Con la moral intacta, el gaditano se siente preparado para afrontar lo que le venga en la presente campaña, cinco o seis novilladas picadas o la alternativa si fuera posible.
Por su lado, Jorge Alba derrocho toda la ilusión de un joven que está empezando y triunfando: finalista en el certamen de Canal Sur la pasada temporada, triunfador en el de la Diputación de Cádiz en la presente, entre otros. Aún así, y con un bagaje de novilladas muchos menos numerosa que las que tenían lugar hace apenas unos años, cuenta con la Escuela Taurina Francisco Montes ‘Paquiro’, Francisco Castañeda y el maestro Emilio Oliva, así como con la ayuda de Isaac Galvín para seguir en el esfuerzo de aprender todo lo necesario para alcanzar su sueño.
Y Francisco Orellana lleva 31 años como mayoral de la Ganadería de Camacho en la Finca La Quinta de Medina. Esta vacada, que luce la corona de Braganza Reyes de Portugal, ha pasado de ser una ganadería de postín, con presencia en plazas de primera y segunda categoría, a lidiar su última novilladas en 2009, vender a la Casa Matilla las camadas de los guarismos 10, 11 y 12, para desde entonces vender el bravo de erales y criar ganado ecológico, lo que actualmente supone el sustento económico de la misma. Aún así, ni ganadera ni mayoral pierden la esperanza de dentro de poco poder ir manteniendo el ganado a edades de utrero y toros para de nuevo alcanzar el sitio que por historia y buena condición del ganado les corresponde. DIARIO Bahía de Cádiz
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