El programa del cribado de cáncer de colon se ha extendido ya a un total de 103.274 personas en la provincia de Cádiz, lo que supone casi el 29,8% de la población de riesgo (de entre 50 y 69 años de edad), por lo que la consejería de Salud y Familias, en la semana en la que se celebra el Día Mundial Contra el Cáncer (4 de febrero), hace un llamamiento a la participación.
Hasta el momento, se han enviado más de 346.588 cartas a gaditanos para que participen en el programa de cribado, superando el 99,06% de la población diana en 2020, una cifra a destacar ya que es la segunda provincia en tasa de cobertura de Andalucía, sólo por detrás de Sevilla. Sin embargo, hay una invitación aceptada del 29,8%, pero el porcentaje de personas que participa baja a un 20,6%.
En total desde su puesta en marcha, según los datos a 31 de diciembre de 2020, se han realizado 2.438 colonoscopias, lo que ha permitido extirpar 1.664 pólipos de los que 490 eran de alto riesgo. Ello supone un importante beneficio para las personas a las que se les ha evitado el desarrollo de un cáncer colorrectal. Además, se han detectado 44 cánceres invasivos, se resalta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
El cribado de cáncer de colon se lleva a cabo mediante un test de sangre oculta en heces que se realiza cada dos años. Esta prueba detecta mínimas cantidades de sangre que no se ven a simple vista. Las personas que aceptan participar en el cribado rellenando la carta que reciben en su domicilio, recibirán también posteriormente un kit para la recogida de la muestra, que deberán entregar en su centro de salud. Las personas que no pertenezcan al sistema sanitario público también pueden participar y, en este caso, entregarán la muestra en el centro de salud más cercano a su domicilio.
Este programa de cribado de cáncer colorrectal tiene como objetivo reducir la carga de enfermedad en la población andaluza, en términos de disminución de la incidencia y mortalidad, así como mejorar la calidad de vida en los casos detectados.
El cáncer de colon es un tumor que se puede curar en el 90% de los casos si se detecta en estadios precoces o en forma de lesiones premalignas, lo que se puede lograr implantando un programa de cribado a toda la población de riesgo medio (50 y 69 años). De hecho, la detección precoz disminuye la mortalidad a corto plazo entre un 30% y un 35%, lo que equivaldría en España a salvar unas 4.000 vidas cada año.
