El pleno de marzo del Ayuntamiento de El Puerto tiene previsto aprobar un paso más de cara a la prometida vuelta, se ve que sin prisas, de los juzgados al centro de la ciudad. Se dará luz verde de forma definitiva del Estudio de Detalle del Área Específica de Revitalización de Pozos Dulces dentro del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Conjunto Histórico y Entorno (Peprichye), que junto a la reparcelación que ya ha sido aprobada inicialmente por Junta de Gobierno Local, “impulsará definitivamente” la obra necesaria para adaptar esta bodega a sede judicial.
Fue en verano de 2022 cuando por parte de la Junta de Andalucía se anunciaba la resolución de la licitación del arrendamiento de un local para albergar los nuevos juzgados portuenses en estas antiguas bodegas, en Pozos Dulces, por 2,4 millones de euros durante cuatro años (sale a 50.000 euros mensuales).
Sin embargo, ya ha pasado más de año y medio de aquel paso, y se sigue a la espera de esa obra de adaptación en la que la consejería dice que va a invertir hasta 1,7 millones de euros. La superficie de las Bodegas del Cortijo, con 4.470 metros cuadrados, permitirá algún día duplicar el espacio disponible actualmente en la localidad y unificar todos los órganos.
El Partido Judicial de El Puerto de Santa María cuenta con cinco juzgados de Primera Instancia e Instrucción, dos juzgados de Vigilancia Penitenciaria, Registro Civil y Servicio Común. Desde hace años se encuentran repartidos en dos inmuebles de alquiler: uno de casi 2.000 m2 en el parque empresarial Las Salinas, que alberga la mayoría de los órganos, y otro de 353 m2 en el polígono Las Salinas.
LA OBRA COMPATIBILIZARÁ “LA FUNCIONALIDAD CON LA CONSERVACIÓN PATRIMONIAL”
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la concejala de Planificación Urbana, Danuxia Enciso, precisa que la intervención prevista ocupa la totalidad de la manzana y la obra compatibilizará “la funcionalidad con la conservación patrimonial de un edificio con un valor simbólico muy importante”.
Los inmuebles que forman las Bodegas El Cortijo son tres fincas catastrales que corresponden a cascos de bodega de una planta de altura y el resto de los edificios entre medianeras de dos plantas; con varios accesos, siendo el principal el que ofrece su frente a través de un almizcate desde la calle Pozos Dulces.
Su rehabilitación y adaptación para la implantación de los Juzgados conseguirán no sólo hacer más accesibles estos servicios a la ciudadanía “sino también la recuperación de estas edificaciones que contribuirán además a la revitalización del centro histórico, que se llenará de actividad y de vida”, se remarca.
La actuación, que continúa sin fecha, implicará “respeto absoluto” de los espacios bodegueros actuando puntual y someramente en dichos espacios, mediante construcciones ‘tipo mueble’ que preservarán sus características constructivas, dejando vistas interiormente la totalidad de las cubiertas.
