CARTA AL DIRECTOR enviada por: Alexia Rodríguez Pequeño, de Vigo
En breve daremos el pistoletazo de salida al verano, pero envueltos en la marejadilla que tenemos a nivel mundial. Empezando con Trump y el desfile militar donde ha exhibido las Fuerzas Armadas del país en Washington, dejando claro el poder que ostenta. Sin olvidar que hace meses puso aranceles a una isla en la que viven pingüinos. Sí señores, deduzco que también harán declaración de la renta o pagarán tributos, el detalle es que no tengo claro el idioma que empelan para gestionarse los pobres animalitos.
Y si vamos un poco más allá, no olvidemos la nueva oleada de ataques entre Israel e Irán, donde los misiles de ambos bandos matan a seres humanos cada día que pasa. Pero si hablamos de España, nos encontramos a los políticos que forman el triángulo de tres vértices, que estos días está en el candelero, entre grabaciones, papeles, investigaciones…
Lo que vemos la sociedad, es lo corroído que está este famoso triangulo entre Cerdán, Ábalos y Koldo. Esto en breve parece una novela policiaca, veremos como acaba… Me pregunto: ¿esto es política o desprestigio? ¡Que lo justifique el que se crea valiente para llegar a un argumento sin ser lapidado!
Viendo cómo está el percal, vamos al meollo de la cuestión que lanzo a cada cual que se disponga a leer. Puede que tenga el lápiz poco afilado y algo renqueante, pero los engranajes vuelven a rodar, después de un largo tiempo de reflexión. Hoy te pregunto: ¿te ha compensado esconder la verdad? ¿Pensabas que tarde o temprano la verdad no saldría a relucir? ¿Me creo tu verdad o la edulcoramos un poco señores/as? ¿Es la mentira una verdad de peso? ¿Te sientes realizado/a al jugar con ella? ¿Pensaste en las consecuencias?
Llegado este punto, tengo claro que existe corrupción en las altas y bajas esferas. No hace falta ir lejos para poder ver como el personal se vende al mejor postor, o pierde los principios que un día eran las bases de la verdad. Todo por el poder. El detalle no es llegar al poder, sino mantenerse siendo transparente, sin cometer negligencias y no dejarse sobornar.
Como colofón, solo puedo pensar que entre tanta política y conflictos bélicos podamos llegar a una tregua, a mejores entendimientos, a tender puentes y lograr la paz que todos/as queremos. DIARIO Bahía de Cádiz