El Cádiz despidió el año 2015 ante su afición, en el Carranza, con una victoria holgada –e inesperada, teniendo en cuenta la sequía goleadora de este equipo- por 5-0 ante el Jumilla en un partido en el que se abría el marcador muy pronto, obra de Plá. Tras una primera parte incomprensiblemente de relax, en el segundo tiempo los de amarillo intentaron congraciarse con una grada impaciente, buscando ampliar la ventaja aprovechando la ‘bajada de brazos’ del rival, modesto: y llegaron los tantos de Salvi, Abel Gómez y el doblete del desesperado Güiza. Tres puntos más para seguir de cerca de Murcia y UCAM, en la lucha por el liderato.
Tarde medio lluviosa la del sábado para despedir el año 2015 en el Ramón de Carranza. El Cádiz, una vez más con el objetivo de amarrar los tres puntos para no descolgarse de la cabeza de la tabla, pero además de mejorar su fútbol, pobre y plano desde hace demasiadas semanas, recibía al Jumilla, en puestos de descenso. En otra semana marcada por la Copa y los líos extradeportivos que de momento benefician a los de amarillo, que se ven en octavos de final –el viernes 18 conocerán al próximo rival-, por mucho que llore el Real Madrid.
Unas 7.000 personas en las gradas (8.384 espectadores, las cifras oficiales), resguardadas de la leve llovizna lo mejor posible, cantaron el 1-0 pronto. Pasado el minuto 2, una rápida jugada culminaba con un centro de Salvi por la derecha que Lolo Plá, que se está erigiendo en el goleador que ansía este Cádiz –cómo se echa en falta a Jona, Airam y Villar…-, no desperdiciaba en el área chica. ¿Significaba que este sí sería un partido tranquilo y cómodo para los de Barragán?
Con la prematura ventaja en el marcador, los locales se relajaron en exceso y dejaron el control de la pelota a los murcianos, que, es verdad, apenas lograban acercarse a Cifuentes, pero impacientaban a una afición que necesita algo más que empates y victorias por la mínima. Y encima, en el 16 Güiza fallaba el 2-0 solo ante el portero; y volvía a equivocarse minutos después en una contra peligrosa. “Saca a Román, saca a Román”, el delantero goleador del filial, llegó a cantar un sector del graderío. Poco cambió el panorama hasta el descanso, con un Jumilla voluntarioso pero inocente y un Cádiz gris presionado por la grada.
El partido se reiniciaba con los de Claudio Barragán más activos y metidos en el juego. Y pudo subir el segundo al marcador en un cabezazo de Salvi a pase de Kike Márquez en el minuto 8. La primera y casi única ocasión de cierto peligro del Jumilla llegaba en el 24, con un lanzamiento desde lejos de Verdú tras varios saques de esquina. Como réplica, Salvi probaba igualmente desde fuera del área –más cerca del centro del campo- y sorprendía a Seral y a todos, colando, ahora sí, el 2-0.
Y ya con los de morado rendidos, en el 33 el jerezano, al fin, marcaba su tercer tanto de la temporada, el 3-0; y el 4-0, en el 38, lo hacía Abel Gómez. Hubo tiempo hasta para ovacionar a Aridane, en el momento de ser sustituido por Garrido, quien lo iba a decir al inicio de la liga… Al borde del 45, Güizá remataba la goleada con el quinto de la tarde. La afición despidió, esta vez sí, a los suyos con aplausos. Sin excesos.
El sábado que viene tocará decir adiós a este año, antes de las vacaciones navideñas, a domicilio en casa de un rival directo, el UCAM, un choque para reivindicarse si se quiere aspirar de verdad al liderado del Grupo IV. DIARIO Bahía de Cádiz
FOTOS del Cádiz-Jumilla, AQUÍ
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