Calle Viva ha mantenido una reunión con el Ayuntamiento de Cádiz para presentarle una serie de medidas de cara a la limitación de las viviendas turísticas (VFT) en la ciudad. Este colectivo ciudadano nacía meses atrás contra la turistificación que empieza a advertirse sobre todo en zonas del centro histórico de la capital.
“Pensamos que (estas iniciativas) son viables y se pueden aplicar para que el boom de las estancias cortas quede limitado y para que los vecinos pueden seguir viviendo en sus barrios”, se incide en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz.
En el encuentro, que Calle Viva valora positivamente, mostró su preocupación “por como los vecinos y vecinas están siendo expulsados de sus casas, como están cambiando los barrios, como existen problemas de seguridad en las viviendas y fincas, como existen altos precios en las viviendas de alquileres o la dificultad de encontrar vivienda en Cádiz”.
Ante esta situación, se sigue apostando por una moratoria además de la aprobación de una ordenanza municipal que regule las viviendas turísticas, y porque se aplique una tasa específica de basuras o de agua para las viviendas vacacionales “y así obtener un beneficio que repercuta en la ciudad como se hace en otras ciudades”.
También se ha propuesto desde dicho colectivo que puedan llevarse a cabo colaboraciones entre la delegación territorial de Turismo de la Junta de Andalucía y la Policía Local (“como ha hecho Conil”), para denunciar a las viviendas turísticas que hayan tenido alguna incidencia en materia de ruidos “y de esa forma, pese a la falta de inspectores, puedan sancionarse este tipo de vivienda, tras una previa identificación”.
El equipo de Gobierno, según apuntan desde Calle Viva, mostró en esta reunión igualmente su preocupación ante este fenómeno, aunque comentó las limitaciones que a nivel local se tienen para regular este fenómeno, ya que es la Junta la que tiene todas las competencias en esta materia y niegan cederlas a las corporaciones locales. “Aun así, acogieron nuestras propuestas con gratitud y se comprometieron a trabajarlas para ver cómo pueden aplicarse”, se añade.
Calle Viva reitera que continuará su labor de concienciación entre los vecinos, seguirá reivindicando el derecho a la vivienda y exigiendo “que se acabe con un modelo turístico destructivo que provoca la expulsión de personas de los barrios de nuestra ciudad”.
