La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (Apdha) ha convocado en Cádiz nuevas movilizaciones para exigir una política de vivienda “justa y real”, al tiempo que insiste en denunciar el caso de Tamara: madre enferma y a cargo de dos niñas desahuciada a principios de abril “sin ninguna alternativa habitacional” por la empresa municipal Procasa de la vivienda social que ocupó ilegalmente en el barrio de Guillén Moreno.
Para este colectivo existen actualmente dos frentes en relación con el problema del acceso a una vivienda digna en la capital gaditana. Por un lado, “los incumplimientos de la legislación vigente, especialmente por parte de las administraciones públicas, respecto a la suspensión de lanzamientos para familias vulnerables”; y por otro, “es urgente reclamar políticas públicas de vivienda que protejan el suelo público y ofrezcan soluciones reales para la población gaditana”.
“No estamos a favor de la ocupación de viviendas públicas, ya sean de titularidad autonómica o municipal, puesto que estas deben ser adjudicadas a través del registro municipal de demandantes de vivienda”, dejan claro representantes de la Apdha, que han celebrado una rueda de prensa junto a Tamara.
No obstante, la organización dice comprender que “estas situaciones se producen en un contexto de desesperación, en una ciudad donde es prácticamente imposible acceder a una vivienda digna, especialmente para personas sin recursos, y todo ello sucede mientras muchas viviendas públicas permanecen vacías y sin acondicionar”.
DESAHUCIOS Y AUSENCIA DE ALTERNATIVAS
Con todo, para la Apdha resulta “llamativo” que en casi dos años del actual mandato con Bruno García en la Alcaldía, el Ayuntamiento “no haya aportado ni una sola vivienda pública a la ciudad, mientras sí ha ejecutado desahucios, como el caso reciente de Tamara y otros similares”.
“Tamara fue desalojada mientras se encontraba en una situación de especial vulnerabilidad por motivos de salud, y, además, ha sido denunciada penalmente, lo que podría derivar en antecedentes penales”, se incide. Se le acusa de ocupación ilegal, pero para esta asociación “es la propia administración la que está incumpliendo la ley al no ofrecer alternativas habitacionales y no aplicar la suspensión de desahucios prevista para casos de vulnerabilidad, recogida en el Real Decreto Ley 1/2025”.
A ello se suma, como ya alertaron semanas atrás desde Adelante Izquierda Gaditana, el incumplimiento del protocolo firmado entre Procasa y los Servicios Sociales para prevenir desahucios en presencia de menores, ofreciendo alternativas habitacionales con antelación: “lejos de cumplir este protocolo, el Ayuntamiento ha actuado con total descoordinación, mientras Asuntos Sociales defendía la vulnerabilidad de la familia ante el juzgado, la delegación de Vivienda avanzaba con el desahucio”.
También desde la derecha en el Ejecutivo se argumentó que el piso ocupado estaba adjudicado a otra familia, “lo cual es falso, ya que no puede haber adjudicación sin recuperación previa del inmueble y su adecuación”.
“En el caso de Tamara ni siquiera se le ofreció alojamiento temporal, como los pisos disponibles en Pueblo Gitano y se ha desplazado a una madre con dos niñas a un albergue municipal que no cumple las condiciones mínimas, todo ello bajo falsas promesas de mediación que nunca llegaron a materializarse”, se relata.
FRENTE A LAS POLÍTICAS DE VIVIENDA DEL AYUNTAMIENTO Y LA JUNTA
Por todo ello, se ha convocado una concentración este viernes día 9 a partir de las 11 horas en la plaza de San Juan de Dios, para apoyar a Tamara Manzano; y otra acción el 16 de mayo en Casitas Bajas,” en protesta por la política de vivienda tanto del Ayuntamiento como de la Junta de Andalucía”, se subraya en la información trasladada a DIARIO Bahía de Cádiz.
Ambas administraciones, ahora con gobiernos del PP, “están promoviendo la enajenación de suelo público, vendiéndolo a promotores privados para construir viviendas en venta no asequibles para la mayoría de la población”. Casos como los de Puntales, Navalips, Tolosa Latour o Casitas Bajas han sido ya denunciados por la propia Apdha en los últimos meses.