Cuarenta y seis años después del 4 de Diciembre de 1977, Andalucía continúa siendo tratada como una colonia interna del Estado español: dependiente en lo económico, alienada e incluso ridiculizada en lo cultural y subordinada e irrelevante en lo político. Aquel día histórico los andaluces nos reafirmamos como Pueblo y exigimos instrumentos políticos para resolver por nosotros mismos nuestros gravísimos problemas y desigualdades. Y poco más de dos años después, el 28F de 1980, lo ratificamos en referéndum superando trampas y zancadillas de todo tipo.
Tras varias décadas de una “autonomía” radicalmente insuficiente y 37 años de gobiernos del PSOE-en algunas legislaturas con la muleta del PA o de IU- estamos comparativamente donde estábamos: en el último lugar de las comunidades autónomas en todos los indicadores. Y ahora, con el PP en la Junta, la situación se agrava aún más (empobrecimiento social, recortes, privatizaciones…) A la vez, y en un ejercicio de cinismo, todos los partidos centralistas, a excepción de la ultraderecha, se declaran “andalucistas”.
Denunciamos esta farsa destinada a crear confusión y a vaciar el andalucismo de su potencial transformador, utilizando a Andalucía para ganar poder en el gobierno del Estado, desde donde se profundiza la situación subalterna de nuestro pueblo. Nos faltan al respeto, porque ninguno de esos partidos, aunque en ocasiones se disfracen con la verde y blanca, considera a Andalucía como sujeto político central. Incluso la silencian en las instituciones donde supuestamente nos representan.
Esos partidos se disponen ahora a prostituir el 4D llamando a “defender a Andalucía y la igualdad entre todos los españoles”. De lo que se trata es de utilizar, una vez más, a Andalucía como ariete del más intolerante españolismo y cabeza de una España uniforme y sin reconocimiento de los derechos de sus Pueblos. Es necesario salir al paso de esta maniobra y mostrar nuestra solidaridad (como en su tiempo hizo Blas Infante) con todos los pueblos de Iberia y del mundo que reivindican su derecho al pleno autogobierno; un derecho que es negado por los estados que se autodefinen falsamente como naciones.
nos faltan al respeto, porque ninguno de esos partidos, aunque en ocasiones se disfracen con la verde y blanca, considera a Andalucía como sujeto político central
Desde la plataforma cívica Andalucía Viva convocamos a las organizaciones sociales, culturales y políticas andaluzas (las que no son delegaciones o franquicias de entidades con sus centros de decisión en Madrid u otros lugares) a celebrar un 4D de reivindicación del nivel de autogobierno que necesitamos y de denuncia de la impostura de los partidos centralistas que practican aquí un extractivismo de votos que es equivalente al que realizan de nuestros bienes comunes las grandes corporaciones multinacionales.
Llamamos a profundizar en nuestra conciencia de Pueblo y a avanzar en la conquista de la soberanía, que no es otra cosa que la capacidad de decidir libremente, por nosotros mismos, sobre todos nuestros asuntos. Este es el único camino para encarar con rigor nuestros problemas. Nadie ajeno a nosotros va a resolverlos. Y queremos hacerlo en fraternidad, y no en confrontación, con otros Pueblos que ya avanzan hacia ese objetivo. Sin permitir que Andalucía sea utilizada contra ellos y contra sí misma.
Sin el pueblo andaluz como sujeto político, es contra el pueblo andaluz. ¡Viva Andalucía libre! DIARIO Bahía de Cádiz
