No sé si han visto el primero de la nueva temporada de ‘The walking dead’, pero va de esto. No basta con aprender que el más fuerte hace lo que le da la gana, sino que además debes dejarle que te orine encima.
Cuando Sánchez fue derrocado era una cuestión política, ahora con las votaciones en masa a Rajoy ya no estoy tan segura.
Los militantes andan que trinan, cómo para que no. Pero no deberían estarlo, es como los votos en papeleta que después con tu buena voluntad, hacen lo que les da la gana. Con tu militancia igual, esclavizada y humilde a pie de Casa del Pueblo, solo festiva para alzar a un candidato y cuando se sale del caminito trazado, palo que te crió en la quijada.
Veremos qué hace, pero lo peor es que era “el” candidato, el elegido por las bases, el democratizado.
Ha habido un golpe bien preparado, una estrategia que en próximas temporadas veremos en qué desarrolla la trama. De momento solo ha habido pinceladas, pero la verdad es que el mar se diluye, la tinta se relame y la fe se disuelve por las rayas traspasadas.
Aun peor, es ver a Rajoy festejando al PSOE, diciendo que han actuado bien y que habrá acuerdos, pero que de la reforma laboral(a su cuello de vestal germana) ni tocarla. Con lo cual nuestros hijos emigrarán aún más lejos y nuestras pensiones quedarán congeladas. La educación por ovarios a revalidas, las huelgas en blanco y negro, los paros a millonadas y el campo con lluvias torrenciales, mientras los sillones se persignan asfaltados, los tacones enganchados al poder y la escenificación en marcha.
Ya les dije que me gustaban mucho las series de zombis y ésta es una nueva temporada. De escarmiento me supongo , de limpiar la casa, de dividir en vez de aunar, para ver si en cuatro años puede haber otra cabeza coronada, que no hay más reyes depuestos que en ‘Juego de tronos’, por las causas mortales más variadas.
Luego el pueblo soberano rumia su mala suerte haciendo bueno ese dicho del Cid de “ qué buen vassallo, si oviesse buen señor!” y la vida sigue y no tendremos elecciones, porque no había nadie que las quisiera, pero menos aun ponerles en bandeja la repescada.
Son puñaladas traseras de toreros difuntos, de cavernícolas con lanzas, de toro ahumado en las noticias, mientras Rajoy prospera por cuatro años fallecidos.
Zombis de todas las casas, de todas las castas afines, con siglas centenarias y mensajes difundidos por la propaganda. Ahora a despiojar cabezas que fueron a enseñanza primaria, a desatascar debates que se han enquistado sin margen de confianza y a desfallecer de hastío de tanto sueño destrozado.
Ya les dije que me gustaban las series y ésta solo ha comenzado. Un buen tráiler y a hacernos pedir más, volvernos la boca adicta en un mar de salivaciones, con palomitas ensangrentadas y subtítulos plastificados en la pantalla. DIARIO Bahía de Cádiz