Una vez recuperado para el Carnaval de Cádiz el alumbrado extraordinario, que el anterior gobierno local izquierdista redujo al mínimo, y que ya se está montando en una treintena de calles y plazas desde hace unos días; el Ejecutivo de Bruno García tiene intención también de engalanar las Puertas de Tierra, como a finales del siglo pasado, con motivo de la principal fiesta de la ciudad.
“Queremos recuperar el engalanamiento. Era algo que nos reclamaba la ciudadanía, las peñas y los colectivos carnavalescos, y que este año vamos a poder hacer realidad; junto al alumbrado, permitirán impregnar de un ambiente festivo Cádiz durante la celebración”, afirma la concejala de Fiestas y Carnaval, Beatriz Gandullo, en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Al respecto, se va a sacar a licitación por casi 109.000 euros (quizá algo tarde ya) la creación de una escultura de siete metros de altura y nueve de largo del dios Baco (dios romano del vino, cuando el mismo Ayuntamiento lucha por que la copla en carnavales le gane al botellón…), que irá representada en posición sentada y con el rostro representando una carcajada, “dando así la bienvenida al casco histórico”.
La escultura se instalará sobre una estructura metálica de 10 metros de largo, 2.5 de ancho y un metro de altura, que se fijará mediante contrapesos en su interior para no dañar de ninguna forma el monumento de las Puertas de Tierra, evitando de esa forma tener que utilizar cualquier tipo de agarre físico y dañino.
Este exorno se sumará a la representación del dios Momo y la bruja Piti, que desde hace unos años es habitual que durante los carnavales se exhiban en el balcón principal de la Casa Consistorial hasta el día de su quema, previstas para el Martes de Carnaval y el Domingo de Piñata, respectivamente.
