El Ayuntamiento de Cádiz va a reforzar el mantenimiento rutinario de los barrios con la incorporación de cuatro parejas de operarios de Mantenimiento Urbano que trabajarán “de manera exclusiva y prioritaria” en las 36 zonas en las que se ha dividido la capital.
De esta forma, cada pareja estará centrada durante un mes en cada una de estas zonas “para garantizar el arreglo de calles y edificios municipales”, que además “se hará con la participación de las asociaciones de vecinos”.
“Con este nuevo enfoque, el Ayuntamiento apuesta por una gestión más eficaz y participativa del mantenimiento urbano, con el objetivo de seguir mejorando la calidad de vida en todos los rincones de Cádiz”, se resalta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Al respecto, días atrás se mantenía en el salón de plenos un encuentro con representantes de asociaciones vecinales, presidida por el alcalde Bruno García, para explicar esta manera de trabajar, a partir del nuevo contrato de Mantenimiento Urbano, adjudicado a Conacon Sando por 2,7 millones de euros al año.
“QUEREMOS QUE CÁDIZ ESTÉ MEJOR CUIDADA”
A decir del concejal de Mantenimiento Urbano, José Carlos Teruel, esta iniciativa es fruto de “la voluntad firme de este equipo de Gobierno por mejorar la ciudad desde sus calles, con un equipo de Mantenimiento Urbano dedicado única y exclusivamente a atender las necesidades de cada barrio, que antes no existía”.
“Queremos que Cádiz esté mejor cuidada, y para eso es esencial actuar con planificación y más recursos, algo que ahora es posible gracias al nuevo contrato, que eleva la inversión de 1,2 millones de euros a 2,7 millones, permitiéndonos una mayor capacidad de respuesta en las actuaciones en la ciudad”, ha repetido este edil del PP.
Además, añadía, “lo hacemos con la participación y colaboración de las propias asociaciones vecinales, que son claves para detectar problemas con rapidez y plantear soluciones que podremos solventar con mayor rapidez y eficacia con este equipo de Mantenimiento Urbano dedicado en exclusiva a los barrios”.
De la misma manera, la concejala de Participación Ciudadana, Loli Pavón, agregaba que una de las claves de este nuevo modelo será la “colaboración estrecha” con las AAVV, que jugarán un papel fundamental en la identificación de necesidades y en la priorización de intervenciones, “gracias a su profundo conocimiento del día a día de los barrios”.