publicidad
miércoles, 18 de junio de 2025 (8:11 h.) – Número 5.286 – Año XXI
  • Cádiz
  • Jerez
  • San Fernando
  • El Puerto
  • Chiclana
  • Puerto Real
  • Rota
WhatsApp
DIARIO Bahía de Cádiz
  • Cádiz
  • La Bahía
    • Jerez
    • San Fernando
    • El Puerto
    • Chiclana
    • Puerto Real
    • Rota
  • El resto del mundo
    • BahíaEmpleo
    • Elecciones
    • Anuario 2024
    • Anuario 2023
    • Anuario 2022
    • Anuario 2021
  • BahíaCultural
    • Revista BiCentenario
  • Carnaval366Días
    • COAC 2025
    • El Jurado poco oficiá
    • El COAC 2024
    • El COAC 2023
    • El COAC 2022
  • Cádiz CF
  • Opinión
    • Cartas al director
  • En imágenes
  • Servicios
    • somos DIARIO Bahía de Cádiz
    • Suscripción boletín
    • Publicidad
no encontramos resultados coincidentes
Ver todos los resultados
  • Cádiz
  • La Bahía
    • Jerez
    • San Fernando
    • El Puerto
    • Chiclana
    • Puerto Real
    • Rota
  • El resto del mundo
    • BahíaEmpleo
    • Elecciones
    • Anuario 2024
    • Anuario 2023
    • Anuario 2022
    • Anuario 2021
  • BahíaCultural
    • Revista BiCentenario
  • Carnaval366Días
    • COAC 2025
    • El Jurado poco oficiá
    • El COAC 2024
    • El COAC 2023
    • El COAC 2022
  • Cádiz CF
  • Opinión
    • Cartas al director
  • En imágenes
  • Servicios
    • somos DIARIO Bahía de Cádiz
    • Suscripción boletín
    • Publicidad
no encontramos resultados coincidentes
Ver todos los resultados
DIARIO Bahía de Cádiz
no encontramos resultados coincidentes
Ver todos los resultados
home Opinión Ana Isabel Espinosa

Los bajos de un autobús

· Firmado por ·
18 de septiembre de 2017
/tiempo de lectura: 3 minutos/
A A
compartir en Twittercompartir por Whatsappcompartir por email

Qué le debe llevar a un menor a plegarse para buscar una salida. Porque debe tener un componente importante de fantasía al igual que la creencia de algunos jóvenes (entre los quince y los diecisiete) que piensan que encontrarán trabajo en menos de un año y -encima- les pagarán al mes 1.500 euros.

Luego lees denuncias de padres de menores abusadas en plena calle por pandillitas de macarras recluidos en centros, pero que en sus evasiones clandestinas  intentan perpetuar conductas encastradas ideológicamente.

No me tachen de radical pero no creo que se pueda importar a una persona y cambiarle el alma. Si mastican fat food televisiva sabrán que hay un programa que trata de matrimonios entre inmigrantes y americanos que les posibilitan a los primeros la residencia legal en el dorado país.

Aquí importamos pateras pero no sociabilizamos -ni educamos- y luego se nos ve la portañuela en las calles vendiendo pañuelitos o acorralando -para toquetearlas- a menores de trece en su propio barrio.

 

El menor que se plegó en los bajos del autobús pensaría que aquí todo era gloria como los inmigrantes que camelan a un gordito americano para pasar la frontera más dura, pero después la vida se impone y estás acampado en ruinas esperando trabajo en un vivero por pocos euros o el americano que creías Onassis tiene más trampas que un pajarero.

Es magnifica la solidaridad, la empatía y la verbalidad impresa en unos labios que esperan maravillas, pero pronto esos emigrantes nos son tan diferentes como nuestros propios hijos a los noruegos o los suecos.

Los que un día fueron nuestros niños -a los que hace nada cambiábamos pañales- se nos van a mares profundos comedores de almas. No en los bajos de un autobús sino en la cubierta, con el estómago encogido y sin saber qué dicha les deparará el mañana. No son ilegales pero les miran de medio lado en esa Europa rica y pija que nunca nos quiso a los latinos sureños de piel tostada, gastadores a dos manos.

Somos pueblo-para ellos- de camareros y “señoritas”, servidores de café y cubatas con sol a raudales caminándoles por la  chepa.  Ahora que hemos crecido y nos va la marcha luxemburguesa adobamos -los pañales de adultos- a jubilados pálidos como vampiros que vegetan gracias a unos impuestos que pagaron en vida que asustarían hasta al Ministro Montoro.

Para eso hemos quedado -no se me escancien- para darles derecho de pernada con nuestros hijos y escandalizarnos cuando leemos que pandillitas de ilegales han acorralado a dos niñas que podrían ser hijas nuestras. Porque la verdad tiene raíces pervertidas, confundidoras y bipolares como las fronteras, las pateras y las leyes que separan almas que – en algún hipotético sueño adolescente-nacieron hermanas.

Plegatines de huesos jóvenes repletos de calcio, sin artrosis ni fibromialgias, apreturas de cuerpo presente en una jungla que da pasos agigantados, comedora de inocentes, de rabiosos y amargados. DIARIO Bahía de Cádiz

Tags: Ana Isabel Espinosaopinión
Tweet117compartir187enviar

otras informaciones que podrían interesarte

Ana Isabel Espinosa

Cuerpo de bachata

17 de junio, 2021
Ana Isabel Espinosa

Respirar por el ano

10 de junio, 2021
Ana Isabel Espinosa

Un muerto en el maletero

3 de junio, 2021
Ana Isabel Espinosa

Unas zapatillas

27 de mayo, 2021
siguiente noticia

Confieso: yo sí votaría

Filosofía, adiós

1-O: República ad portas, tic tac, tic tac...

Desmanteladas tres plantaciones de marihuana en naves de dos polígonos industriales de Jerez y detenidas seis personas

sello ROMDA

publicidad

LADO CSIF
LADO ADVANZ
LADO YOGA
banner VicenteFerrer (cambiado por banner publisuites)
LADO CRUZ ROJA
LADO PROVEEDORES (CHURROS)
LADO CAMISETAS
banner churros 2
publicidad
  • ¿Quiénes somos?
  • Las cinco W de DBC
  • Publicidad
  • Aviso legal
  • ¿Colaboramos?
 DIARIO Bahía de Cádiz v. 5.0 – © 2004-2025
 ISSN: 2174-4963 – ROMDA Nº: OLDVVHKG21 – NIF: 75.817.982-T
 fundado el 7 de julio de 2004
 en CÁDIZ (entre Iberoamérica y Europa)
Instagram Facebook-f Twitter Envelope
DIARIO Bahía de Cádiz, como la mayoría de webs, utiliza cookies propias y ajenas. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies. acepto más sobre este aviso legal
sobre cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may affect your browsing experience.
Necessary
Siempre activado
Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.
Non-necessary
Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.
GUARDAR Y ACEPTAR
no encontramos resultados coincidentes
Ver todos los resultados
  • Cádiz
  • La Bahía
    • Jerez
    • San Fernando
    • El Puerto
    • Chiclana
    • Puerto Real
    • Rota
  • El resto del mundo
    • BahíaEmpleo
    • Elecciones
    • Anuario 2024
    • Anuario 2023
    • Anuario 2022
    • Anuario 2021
  • BahíaCultural
    • Revista BiCentenario
  • Carnaval366Días
    • COAC 2025
    • El Jurado poco oficiá
    • El COAC 2024
    • El COAC 2023
    • El COAC 2022
  • Cádiz CF
  • Opinión
    • Cartas al director
  • En imágenes
  • Servicios
    • somos DIARIO Bahía de Cádiz
    • Suscripción boletín
    • Publicidad

DIARIO Bahía de Cádiz v. 5.0 / © 2004-2024 / ISSN: 2174-4963 / ROMDA Nº: OLDVVHKG21 / NIF: 75.817.982-T

DIARIO Bahía de Cádiz, como la mayoría de webs, utiliza cookies propias y ajenas. Si sigues navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies. Más sobre este aviso legal.