El renombramiento del veterano puente José León de Carranza, que une Cádiz y Puerto Real, en aplicación de las leyes de memoria histórica (aunque los nostálgicos no lo entiendan, como ocurrió con el estadio Ramón de Carranza, hoy Nuevo Mirandilla), está estos días de actualidad a raíz del fin de la recogida de apoyos virtuales promovida por Sumar para que pase a llamarse Rafael Alberti, y las afirmaciones de su diputada nacional por la provincia, Esther Gil de Reboleño, dando por hecho que “existe un consenso total con las autoridades estatales para que este cambio sea una realidad muy pronto”.
Al respecto, dentro de esa imprecisa coalición que es Sumar cohabita hoy día Izquierda Unida. Y su coordinador provincial, Jorge Rodríguez, aunque reconoce que Rafael Alberti “reúne muchas razones” para dar nombre a este emblemático puente, apuesta por que se lleve a cabo “un proceso de consulta a la ciudadanía del que finalmente salga un nombre consensuado y refrendado por el mayor número de gaditanos”. De hecho, en los últimos meses se han lanzado otras propuestas como ‘puente de los Astilleros’ o ‘puente de la Bahía Obrera’, y ‘puente Juan Sebastián de Elcano’.
La subdelegada del Gobierno de España, Blanca Flores, tampoco termina de decantarse por ningún nombre concreto, “quien tiene la última palabra es el Ministerio de Transportes”, ha remarcado este mismo martes. Idéntica postura, la de no mojarse, que mantiene el Gobierno local gaditano de Bruno García
Mientras quien sí se opone a que se rebautice como ‘puente Rafael Alberti’ es curiosamente (o no tanto) la viuda del poeta portuense, María Asunción Mateo. En declaraciones recogidas por Diario de Cádiz, salía días atrás rechazando que Alberti “sea utilizado como arma arrojadiza para dividir a los gaditanos”, y defendiendo que se siga conociendo con el nombre del alcalde franquista ya que “en este momento histórico plantearse la filiación política de quien lo impulsó me parece un error”.
“CARRANZA FUE FRANQUISTA, GOLPISTA Y COLABORADOR DE LOS NAZIS”
Contrariando a Mateo, IU resalta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz que “lo realmente importante” de este asunto “es que se inicien los trámites para que un personaje que fue defensor y artífice del franquismo en la ciudad de Cádiz y la provincia no siga dando nombre a un puente”.
Así, como es evidente, el izquierdista Jorge Rodríguez está “totalmente a favor” del cambio de nombre del actual puente José León de Carranza, “tal y como vienen defendiendo los movimientos memorialistas, y tal y como ha planteado en el Gobierno central la diputada de Sumar Esther Gil de Reboleño”.
“La denominación actual supone un claro homenaje al que fue un alcalde franquista, golpista y colaborador documentado de los nazis en el envío de armas al mando sublevado de 1936; por tanto, estamos hablando de un claro incumplimiento de la Ley de Memoria Democrática que debe ser subsanado lo antes posible”, se argumenta desde IU.
Añade Rodríguez que “un acceso a Cádiz tan emblemático como este puente no puede llevar el nombre de una persona que ostentó cargos como el de alcalde no elegido (entre 1948 y 1969), procurador de las Cortes franquistas. vicepresidente local de Renovación Española, con claras implicaciones políticas en los movimientos previos al golpe, además de que su empresa colaboró con el Tercer Reich en 1936; y todo esto, por mucho que José León de Carranza fuera el impulsor del puente”.
E hijo de Ramón de Carranza, otro alcalde de la capital gaditana vinculado con la sanguinaria dictadura y que daba nombre al estadio municipal hasta 2021 (aunque el PP haya amagado con recuperarlo, capricho que va olvidando al ser consciente de que estaría incumpliendo la ley).
Respecto al nombre de Rafael Alberti propuesto por la diputada de Sumar, el coordinador de IU Cádiz indica que “como no puede ser de otra manera, desde Izquierda Unida vemos que la figura de Alberti reúne muchas razones para darle nombre a este puente de acceso a Cádiz; tanto por su lucha por los valores democráticos, como por haber sido autor de algunas de las palabras más bonitas que se le han escrito a Cádiz y su bahía”.
“HAY QUE EMPEZAR RETIRANDO YA EL BUSTO DE CARRANZA DEL PUENTE”
A su vez, IU en la ciudad de Cádiz celebra que, “por fin”, se apliquen las normas memorialistas en uno de los símbolos de la capital “que por desgracia, a día de hoy, sigue rindiendo honores a uno de los personajes siniestros que en Cádiz y en Andalucía estuvieron vinculados con el golpe de Estado de 1936 y la posterior represión franquista”.
Sin embargo, considera que esta medida “llega tarde, pero llega”, y que su aplicación “debe realizarse sin ambages ni vacilaciones”, para lo que se propone que “de manera inmediata” el Ministerio de Transportes proceda a quitar el busto de Carranza existente todavía hoy en el puente, y que forma parte del Catálogo para la retirada de la simbología franquista en la ciudad que se aprobó por parte del Ayuntamiento en julio de 2019.
“Es incoherente mantener esta simbología franquista, ubicada en el extremo del puente situado en la ciudad de Cádiz dentro de la parcela donde se ubica la Demarcación General de Carreteras, a la par que hacer pública la retirada del nombre al puente, cuestión esta que podría resolverse de un día para otro sin más vacilaciones”, se remarca.
IU Cádiz ciudad reflexiona además que este es el segundo anuncio público que se realiza en 2025 sobre el cambio de nombre del puente Carranza: “las normas memorialistas precisan más de ‘hechos que de palabras’”, por lo que animan a que tanto la retirada del busto como del nombre “se realice con la máxima celeridad e incorporando en el proceso a las entidades memorialistas, ocupando éstas el papel que se merecen”.
En este sentido, esta formación (integrada dentro de la coalición municipal Adelante Izquierda Gaditana) reconoce en esta medida el impulso que entidades memorialistas locales, como la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Cádiz y la plataforma Carranza Incumple, “que han solicitado en distintas ocasiones a los ministerios competentes la retirada del nombre del puente”.