Este 4 de diciembre, extraoficialmente Día Nacional de Andalucía (rememorando las manifestaciones masivas del 4-D de 1977, por la autonomía plena), la Junta conmemora lo que llama Día de la Bandera de Andalucía; cita inventada e instaurada desde 2022 por el Gobierno del derechista Juan Manuel Moreno Bonilla que, en la teoría, impulsa iniciativas educativas, sociales e institucionales para “garantizar la máxima difusión de los valores y significados que encarna dicho emblema”.
Más allá del acto central en Sevilla, en San Telmo, la Junta ha desarrollado este mismo jueves “homenajes” institucionales a la blanquiverde en el resto de provincias. En Cádiz se ha organizado un acto en la Casa de Iberoamérica, en la capital, presidido por la delegada del Gobierno andaluz Mercedes Colombo, y con presencia apabullante de políticos del PP.
La coral de la Universidad de Cádiz ha sido la encargada de abrir el acto con la interpretación de la composición de Carlos Guastavino ‘Se equivocó la paloma’, y de cerrarlo, obviamente con el himno de Blas Infante. Momento en el que la delegada del Gobierno andaluz y la presidenta de la Diputación, Almudena Martínez, izaron la blanquiverde en un mástil colocado dentro del patio.
Además, antes del discurso de Colombo, el escritor, articulista y divulgador de la historia de Andalucía a través de sus libros, Jesús Maeso, ha realizado un “elogio” a la bandera de Andalucía, previo a una nueva actuación de la coral de la UCA, con ‘Las nubes me trajeron’, de Dante Andreo.
“UNA BANDERA DE CONVIVENCIA Y CONCORDIA”
En su perorata, la máxima responsable en la provincia del Gobierno autonómico ha reivindicado respeto e igualdad para los andaluces, reinterpretando que el 4-D “nos consagramos a una bandera de convivencia y concordia, donde los andaluces apelamos a la unidad e igualdad. Una bandera que reconoce el derecho a la autonomía y a la solidaridad que contempla la Constitución”.
Para esta política del PP, “se trata del día que cambió la historia de los andaluces. Un día en el que el pueblo ondeó la blanca y verde en busca de igualdad, libertad y respeto a un proyecto común”.
Eso sí, es muy curioso que ahora el PP se rinda ante la bandera andaluza (y a los significados que se le quieran dar) y a ese simbólico 4-D, cuando en 1980 Alianza Popular (el origen del Partido Popular actual), se alió con UCD para boicotear (instando al voto en blanco o la abstención) el referéndum de autogobierno del 28-F de 1980 por la vía del 151 de la Constitución (como las otras nacionalidades históricas: Catalunya, Euskadi y Galicia).

“DEJAMOS A UN LADO IDEOLOGÍAS Y SALIMOS A LAS CALLES UNIDOS”
En la nota trasladada a DIARIO Bahía de Cádiz se subraya que Mercedes Colombo ha destacado en su discurso que se trata del cuarto año que su Junta conmemora esta fecha, “en la que rendimos homenaje al emblema que nos une y nos enorgullece. Somos fieles a la bandera blanca y verde, presente en nuestro día a día, y que no excluye a nadie”.
Y recordando aquellas históricas y multitudinarias manifestaciones celebradas el 4 de diciembre de 1977 (en las que un disparo policial asesinó en Málaga a García Caparrós), ha incidido en que “pocas imágenes representan tanto a nuestra tierra como ese verde que mira al futuro con ambición y ese blanco que mantiene viva la pureza, la nobleza y la solidad del pueblo andaluz; una bandera que en Cádiz sentimos muy nuestra”.
Según Colombo, aquel 4-D “millones de andaluces dejamos a un lado ideologías y diferencias, y salimos a las calles unidos”. “Fue un ejemplo de unidad y de dignidad que hoy sigue emocionando, que sigue vigente y que hace que nuestra bandera esté en muchos sitios, por todas partes”, ha apostillado.
“Celebramos el día del orgullo de ser andaluces, el día de la igualdad entre españoles. Defendemos un andalucismo moderno, equilibrado y transversal, que no pone etiquetas ni excluye sensibilidades. Un andalucismo y una provincia de Cádiz que construye, que no enfrentamos. Que tendemos puentes y que defendemos el progreso, al mismo tiempo que creemos en el talento de nuestra gente, en la responsabilidad y en la ambición de futuro”, ha remarcado la delegada.
Y para terminar, Colombo ha sentenciado que “a Andalucía nadie le ha dado nada. Los andaluces y los gaditanos lo que hemos conseguido, lo hemos logrado con esfuerzo, con trabajo y con sacrificio. Estamos construyendo la Andalucía del mañana bajo una bandera común para todos. Una Andalucía y una provincia a la que hoy se le respeta, escucha y valora”.

¿PERO QUÉ PASÓ EL 4-D?
El 4 de diciembre de 1977, en la España postfranquista y todavía preconstitucional, se calcula que más de 2 millones de andaluces llenaron las calles de las ocho provincias en manifestaciones convocadas por la mayoría de los partidos políticos y asociaciones ciudadanas (y rechazadas por los nostálgicos afines al dictador muerto y la extrema derecha), reivindicando la consecución de una autonomía plena para la comunidad autónoma, y su reconocimiento como nacionalidad histórica.
Al frente de estas manifestaciones se encontraba la bandera blanca y verde que ideara Blas Infante, “como símbolo de unión y fraternidad de toda la ciudadanía andaluza ante su futuro”, según la Junta actual.
Estas movilizaciones obligaron con el tiempo a UCD, entonces en el Gobierno de España, a negociar el actual modelo autonómico, no sin poner trabas. Desembocó en el referéndum del 28 de febrero de 1980 y el Estatuto del 81.
La marcha más emblemática de aquel 4-D fue la de Málaga, donde la entonces policía armada, en una de sus cargas para disolver a los manifestantes tras un incidente al colocarse la bandera blanquiverde en la Diputación, asesinaba a Manuel José García Caparrós.













