La salud mental del empresariado en la provincia de Cádiz atraviesa una crisis que no puede ocultarse, según alerta la Asociación de Jóvenes Empresarios de Cádiz (AJE Cádiz), a partir de los resultados de una encuesta realizada entre cerca de 400 personas, un trabajo costeado por la Diputación.
En la misma se refleja que más de 70% de los titulares de negocio gaditanos que ha respondido a este estudio (empresarios de pymes y sufridos trabajadores autónomos) presenta “indicadores compatibles” (no es lo mismo que diagnóstico clínico) con ansiedad; mientras que el 69% muestra señales de depresión. Igualmente, se resalta que más de dos tercios de los encuestados (68%) ha llegado a plantearse abandonar su actividad por motivos de salud mental.
Estos datos dibujan un panorama preocupante que AJE Cádiz define como un problema “no anecdótico”. “Llevamos años hablando de talento, innovación y emprendimiento, pero nadie habla del precio humano que se paga por sostener una empresa en un entorno que no protege. Aquí hay personas que lo están dejando todo, incluso su salud mental, para levantar empleo, oportunidades y futuro en esta tierra. Y muchos lo hacen con miedo, en soledad y sin red. No es una anécdota estadística, es un síntoma estructural”, advierte dicha asociación, que reclama medidas urgentes.
Dicho informe también revela también que el descanso se ha convertido en un “lujo inalcanzable” entre quienes lideran un negocio en la provincia gaditana. El índice de adicción al trabajo (medido con la escala DUWAS) sitúa a la muestra en una media de 1 sobre 5, lo que refleja niveles extremos de sobrecarga laboral.
En paralelo, la encuesta constata que alrededor del 91% de empresarios consultados apoya suspender la cuota de autónomos durante las bajas por salud mental, mientras que el 85% reclama la creación de un plan nacional de prevención del suicidio empresarial.
“NO SE TRATA DE BALANCES, SINO DE VIDAS”
“Pedimos protocolos reales en las empresas y medidas públicas inmediatas que protejan la salud mental del empresariado. Si no cuidamos al que cuida, no habrá nada que sostener”, remarcan a colación desde AJE, que dice estar trabajando ya en la redacción de propuestas legislativas concretas que puedan cambiar este “paradigma tóxico”. “No se trata solo de dar voz a una problemática silenciada, sino de actuar. Y actuar ya. Porque no se trata de balances, sino de vidas”.
En este sentido, en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la Asociación de Jóvenes Empresarios de Cádiz lanza ya una serie de propuestas, reclamando: protocolos internos de detección y derivación rápida a recursos psicológicos; derecho efectivo a la desconexión y límites de disponibilidad en picos de trabajo; formación a titulares y mandos en conversación segura y gestión de crisis; seguimiento trimestral con un panel corto de indicadores para medir avances; y esa suspensión de la cuota de autónomos en bajas por salud mental (igual que los trabajadores por cuenta ajena) junto a un plan nacional de prevención del suicidio empresarial.
Este trabajo se enmarca en el proyecto Vértice del plan DipuInnova+ 2025, financiado al cien por cien por la Diputación de Cádiz. La encuesta se realizó de manera online, con un nivel de confianza del 95% y utilizando instrumentos de medición como el EADG para ansiedad y depresión o el DUWAS para la adicción al trabajo.
Desde AJE Cádiz se apostilla que los resultados no equivalen a diagnósticos clínicos, pero sí constituyen una señal de alarma que exige respuestas inmediatas.