En enero de este año la Unión Europea emitió un comunicado presentando la Estrategia Europea para los Plásticos en la Economía Circular. El concepto básico de esta economía es reducir al máximo la entrada de nuevos recursos a la economía mediante la reutilización y reciclaje de los que ya están en el circuito.
En lo relativo a los plásticos, el objetivo de la UE es que en el año 2030, todos los plásticos dedicados a envases provengan de material reciclado. Para ello, la UE se ha marcado 4 líneas básicas de actuación:
- Apoyar la investigación para hacer de los plásticos un material más fácilmente reciclable.
- Fomentar la separación de materiales en la recogida de residuos.
- Modernizar la capacidad de selección y reciclaje de residuos.
- Crear mercados viables para los plásticos reciclados.
Las medidas afectarán a negocios de todos los tamaños
Aunque estas medidas puedan parecer demasiado “macro” y sea difícil inferir cómo van a afectar a un pequeño negocio. Lo cierto es que los expertos del sector tienen muy claro que se traducirán en una nueva realidad para todo tipo de empresas, ya que prácticamente todas reciben productos envasados en plásticos.
En concreto, desde Miltek, empresa dedicada a la producción y venta de prensas empacadoras de residuos, prevén que la UE endurecerá sus regulaciones en todo lo relativo al uso y deshecho de plásticos, fomentado la implementación de procesos de gestión de residuos eficientes, tanto desde una vía positiva con líneas de financiamiento, como desde una línea más coercitiva con multas, sanciones y tasas para el vertido de plásticos en vertederos.
Por tanto, parece que el marco jurídico que regulas los residuos va a cambiar completamente en los próximos 12 años y para muchas empresas supondrá adaptaciones e inversiones, que sería conveniente ir anticipando.
Por ejemplo, el propio Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente de España prevé que la revisión de la Directiva 1991/31/CE, de vertido de residuos, obligue a adaptar el Real Decreto 1481/2001, de eliminación de residuos de vertedero. Según Mil-Tek estudios realizados en Alemania y otros países de la UE sugieren que las medidas más efectivas para evitar el desaprovechamiento de plásticos reciclables son la subida de tasas e incluso la prohibición de deshacerse de estos plásticos en los vertederos, y por tanto es probable que la UE se mueva en esa línea.
Además, también parece probable que la UE invierta en concienciar a los consumidores, de donde se prevé que haya un mayor rechazo paulatino hacia los embalajes que usan plásticos en exceso y muy especialmente plásticos no reciclados. Esto significará otro punto de presión para que las empresas traten de adaptarse a las nuevas exigencias del mercado.
Cómo se puede adaptar un negocio a esta situación
En primer lugar se debe tratar de reducir al mínimo el uso de plásticos innecesarios en los embalajes. En muchos casos, algo que no depende tanto del negocio en sí, como de sus proveedores y que, por tanto, se debe tener en cuenta al seleccionarlos, especialmente si se prevén colaboraciones a largo plazo. En segundo lugar, realizando un plan de gestión de residuos que posibilite la separación adecuada de los mismos y la entrega a las empresas o instituciones públicas de reciclaje. En este sentido, prensar los residuos puede ser clave para que el proceso sea rentable, ya que reduce el volumen de los mismos en hasta un 90% posibilitando acumular mucho más material en el mismo espacio para que su recogida merezca realmente la pena. DIARIO Bahía de Cádiz
