Partidos de la oposición (como PSOE, IU, Unión Portuense o Adelante Andalucía) y sindicatos continúan denunciado públicamente la “dramática e insostenible” situación que está sufriendo la plantilla de la ayuda a domicilio del Ayuntamiento de El Puerto, servicio privatizado en manos de Óbolo (controvertida firma que se ha hecho con el mismo contrato en la capital gaditana), mientras el equipo de Gobierno liderado por Germán Beardo “mira hacia otro lado”.
Desde que la empresa onubense Óbolo Sociedad Cooperativa Andaluza de Interés Social asumió en mayo de 2024 la explotación de este servicio público por 5,4 millones de euros y dos años de duración (que costea principalmente la Junta de Andalucía, ya que es su competencia, delegada en los ayuntamientos), las trabajadoras han presentado más de una veintena de denuncias ante la Inspección de Trabajo y los tribunales.
Se denuncian nóminas incompletas, impago de conceptos salariales, despidos sin finiquito, aumentos de jornada sin respeto a la antigüedad y vulneraciones del convenio provincial. Incluso existe una resolución judicial favorable a las empleadas, que la empresa prefiere ignorar pagando sanciones antes que corregir las irregularidades.
En una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz por delegadas de CCOO en el comité de empresa repiten la alerta que desde hace meses están trasladando también desde UGT (que además se queja que el Gobierno local del PP no está contando con sus representantes en la elaboración del futuro pliego del servicio): “mes tras mes, las empleadas enfrentan graves problemas con sus nóminas, caracterizados por recortes injustificados y una completa falta de transparencia”.
“DESESPERACIÓN PROFUNDA CADA MES”
CCOO expone que desde la llegada de Óbolo, “algunas compañeras han visto su salario reducido a más de la mitad, mientras que otras ni siquiera han cobrado”. Esta situación ha llevado a que se vean obligadas a reclamar continuamente estas incidencias “y a esperar indefinidamente su resolución, generando una desesperación profunda: no sabemos si vamos a cobrar, ni cuánto vamos a cobrar, ni si lo haremos en plazo”.
Entre los incumplimientos destacados de esta contrata municipal se encuentran: nóminas sin transparencia en los conceptos y con errores constantes; falta de abono correcto de trienios; no actualización del kilometraje; problemas en el cálculo de las prestaciones durante las bajas médicas; ausencia de cursos de prevención de riesgos laborales para nuevas contrataciones; nula oferta de cursos de formación; y liquidaciones incorrectas o directamente no abonadas.
Pero además, Óbolo no ha abonado los atrasos del 3% correspondientes a la subida salarial anual, que deberían haberse aplicado en la última nómina.
“La comunicación con la empresa es prácticamente inviable, tanto por vía telefónica como por correo, ya que no contestan o lo hacen sólo después de mucha insistencia”, se apostilla.
Por todo ello, y ante una situación “insostenible”, la mayoría de CCOO en el comité exige soluciones inmediatas y advierte de que seguirá denunciando “todos y cada uno de estos hechos hasta que se garantice el respeto a los derechos laborales” de las trabajadoras del servicio de ayuda a domicilio de El Puerto.
“Se trata de un servicio esencial que garantiza la atención y cuidados a buena parte de la ciudadanía portuense; no se puede permitir que se convierta en un espacio de precariedad, improvisación y discriminación sindical”, añaden en su propia denuncia desde UGT, respaldada por Adelante Andalucía que exige la municipalización del servicio: “los cuidados son el presente y el futuro; y merecen una gestión pública, democrática y con condiciones dignas”.