Las obras de estabilización y consolidación del Arco de la Santísima Trinidad, en la plaza de Los Jazmines, en el centro de El Puerto, se han dado por acabadas, devolviendo a este monumento “su esplendor original”.
Esta restauración en la que el Ayuntamiento ha invertido 42.000 euros, ejecutada por la empresa local Construcciones Francisco Manzano, ha permitido consolidar la estructura y devolver a la piedra arenisca el aspecto original, siguiendo la inspiración barroca.
Este Arco de la Trinidad de autoría desconocida y “un símbolo vivo de la ciudad” es una obra de mampostería de finales del siglo XVIII, construida con piedra de las canteras de San Cristóbal (calcarenitas) y ladrillo cerámico cocido. La estructura se compone principalmente de elementos pétreos, que conforman las pilastras, el arco y la mayor parte de la fachada superior.
Tras algo más de un mes de “trabajos especializados”, el arco luce ahora “consolidado y protegido para garantizar su conservación a largo plazo”, se remarca en el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz. El paso del tiempo había afectado considerablemente su estructura, ya que la piedra presentaba una importante pérdida de material debido a la acción de los agentes atmosféricos.
“CONSTRUIMOS IDENTIDAD Y CIUDAD”
A decir del alcalde, Germán Beardo, con esta intervención “se recupera una joya única del patrimonio portuense, devolviendo a uno de los rincones más bellos del centro histórico su carácter monumental y reforzando la identidad cultural de la ciudad”.
“Seguimos recuperando espacios de enorme valor cultural e histórico, cuidando la herencia que nos define y que también nos proyecta hacia el futuro, porque conservar nuestro patrimonio es construir identidad y ciudad”, apostilla el primer edil del PP.