Quedan unos tres años para las próximas elecciones municipales, las de 2019, pero el PP en Chiclana ya hace promesas pensando en ese momento: “bajaremos los impuestos cuando volvamos a gobernar”. “Demostraremos que hay otra forma de hacer política, alejada de gastos innecesarios y que no prioriza la contratación de amigos”, sentencian desde la derecha, una vez que el pleno ha tumbado las más de 3.000 alegaciones contra las ordenanzas fiscales para 2017, que contemplan polémicas subidas justificadas por el Gobierno local tras las “bajadas temerarias” del IBI ejecutadas por el anterior Ejecutivo popular, que mantienen al Consistorio en una complicada situación económica.
Quedan unos tres años para las próximas elecciones municipales, las de 2019, pero el PP en Chiclana ya hace promesas pensando en ese momento: “bajaremos los impuestos cuando volvamos a gobernar y recuperemos la Alcaldía”. Lo asegura el concejal Andrés Núñez, quien reitera que la derecha “tiene decidido” bajar impuestos como el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), “tras la bestial subida en un 20% por parte del Gobierno municipal que encabeza José María Román”.
Una subida que el actual Ejecutivo defiende que ha tenido que efectuar tras las “bajadas temerarias” llevadas a cabo a finales del pasado mandato por los populares con fines meramente electoralistas, que han dejado en una critica situación las arcas del Consistorio. La pasada semana, en pleno, Schauer fue de nuevo clave con su abstención, junto a los votos a favor del Gobierno local en minoría, para rechazar, a partir de informes desfavorables, las 3.126 alegaciones presentadas por colectivos y particulares a las nuevas ordenanzas fiscales para 2017, y dar vía libre a su aplicación.
Núñez insiste en un comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz en su argumentario repetido una y otra vez desde hace meses: “corregiremos el enorme daño que PSOE-Ganemos y el concejal no adscrito Stefan Schauer (ex del PP, curiosamente) provocarán en los chiclaneros de a pie, en la hosteleros, en los hoteles y el comercios, que a partir del 1 de enero de 2017 tendrán menos dinero para que quienes gobiernan nuestra ciudad sigan de fiesta y gastando el dinero a manos llenas en cosas innecesarias”.
Para el ahora principal partido de la oposición “la subida de impuestos no conllevará mejores servicios y sí más gasto en cosas innecesarias y caprichos, como ha ocurrido durante este año con la compra de sillas y luces de lujo, por un montante de 10.000 euros, para el despacho del alcalde, José María Román, y que se sigan dando contratos de 6.000 euros a socialistas por hacer minicursos, como ha ocurrido con Antonio Pérez Noria”. Y, obvia, tras meses repitiendo lo mismo, “los 70.000 euros en total que el Ayuntamiento y, por tanto, los chiclaneros, hemos tenido que desembolsar por el contrato y los gastos del nombramiento del socialista Manuel Chozas como gerente de la empresa municipal Emsisa durante el último año”.
Núñez añade que “el rechazo de las más de 3.000 alegaciones contra la subida de impuestos supone un hachazo a la democracia en Chiclana, pues mientras el pueblo y los principales agentes económicos le han dicho a Román que subiendo los impuestos se les está asfixiando, el Gobierno municipal impone el rodillo conseguido con la ayuda de alguien que ha traicionado a sus compañeros, al sector en el que ha trabajado, el exdelegado de Turismo Stefan Schauer. No sabemos cómo va a mirar al sector para pedirles trabajo y prometerles que va a luchar por ellos”.
Quien es también presidente del PP chiclanero critica además al PSOE y Ganemos “por el fraude electoral que han cometido, por la traición a sus votantes y al pueblo, que va a ser más pobre para tener a unos representantes en el Gobierno local más ricos, más cómodos en sus sillas y con unos sueldos que multiplican por cinco el salario mínimo interprofesional, y todo ello mientras habrá chiclaneros que no podrán pagar”. Habría que preguntarle a Núñez cuánto cobraba durante el mandato anterior siendo miembro del equipo de Gobierno…
Finalmente, Andrés Núñez resalta que “estoy razonablemente contento por el trabajo realizado por el PP” alrededor de esta cuestión: “hemos estado en la calle, promoviendo la mayor cantidad de alegaciones suscritas contra las tasas municipales en la historia, en total más de 3.000. Hemos hecho propuestas y aportado soluciones para evitar el robo del Gobierno local. Tenemos no ya un partido, un equipazo, concejales, afiliados, simpatizantes, que poniendo su tiempo, su esfuerzo, han puesto a la disposición de la ciudad la posibilidad de gritar contra el robo del PSOE y Ganemos”.
“Sin complejos y con firme voluntad y compromiso con la cuidad, en 2019 bajaremos los impuestos y demostraremos que hay otra forma de hacer política, alejada de gastos innecesarios y que no prioriza la contratación de amigos”, sentencia, como si las urnas estuvieran ya a la vuelta de la esquina.
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