El Gobierno chiclanero del PSOE, que no tiene mayoría absoluta, ha dado a conocer las propuestas que se van a estudiar y que deberá consensuar con la oposición para su posterior incorporación al presupuesto del Ayuntamiento para 2016. “Son líneas fundamentales y, por tanto, están sujetas a modificaciones hasta la definitiva aprobación del presupuesto antes de que acabe el año”, ha anotado el concejal de Hacienda. Entre estas medidas se destaca el recorte en gastos: en cargos de confianza, publicidad, atenciones protocolarias, horas extraordinarias y gratificaciones de los empleados. Y por el otro lado, para subir los ingresos, se propone la subida del IBI.
El Gobierno chiclanero del PSOE, que no tiene mayoría absoluta, ha dado a conocer las propuestas que se van a estudiar para su posterior incorporación al presupuesto del Ayuntamiento para 2016. “Son líneas fundamentales y, por tanto, están sujetas a modificaciones hasta la definitiva aprobación del presupuesto antes de que acabe el año”, ha anotado el concejal de Hacienda, Joaquín Guerrero Bey.
Unas líneas fundamentales que vienen precedidas de unos hechos, que son los que han marcado estas primeras propuestas. Dichos factores son: la regla de ahorro neto negativo, el incumplimiento del plan de ajuste municipal en los tres trimestres precedentes, la superación de los límites legales de endeudamiento, la subida de los niveles de endeudamiento con entidades bancarias, la deuda total cercana a 175 millones de euros, el incumplimiento del promedio medio del pago a proveedores en los primeros seis meses del año, los resultados deficitarios de los últimos ejercicios, así como los informes negativos sobre el estado de las empresas públicas Chiclana Natural y Emsisa, durante diversos trimestres anteriores.
“A todo esto hay que sumar la finalización de la carencia en los pagos de los préstamos solicitados en 2012 y 2013 o dejar de ingresar de la PIE la cantidad de 1,1 millones de euros entre 2016 y 2018, porque se percibieron en 2013, según el Ministerio de Hacienda”. Además, “no obtendremos los 2 millones de euros de Cemabasa, estaremos obligados a abonar la tasa de tratamiento de basuras y habrá un decrecimiento de ingresos de forma desorbitada de 11 millones de euros”, ha vuelto a alertar por enésima vez este edil del PSOE; añadiendo otra vez que de cara a 2016 el Ayuntamiento está obligado a cumplir con el pago de casi 8 millones de euros a los bancos –y así cada año hasta 2022-, o sea la devolución de los préstamos solicitados años atrás para el pago a proveedores. “Nuestro Ayuntamiento se encuentra anémico”, ha subrayado.
Ante todos estos factores, se han planteado unas propuestas que serán llevadas a estudio para incorporarlas al presupuesto definitivo que debe estar acabado antes de que finalice el año. “Como este Gobierno municipal tiene un marcado carácter social, a fin de poder poner en funcionamiento planes de empleo y ayudar a los que más lo necesitan, estamos estudiando determinadas medidas que pudieran incluirse finalmente en el presupuesto definitivo”, ha señalado Guerrero Bey en una nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Y como se preveía y viene alertando el PP día tras día, entre las medidas de ingreso que se plantean están la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), después de que el anterior Gobierno de la derecha lo haya bajado de forma notable. “El total previsto de la recaudación por IBI supondría 26 millones de euros, pero de esa cantidad, por la subida del tipo aplicable sólo supone un incremento de más de 4,7 millones de euros”. A esto habría que unir la regularización de viviendas, que supondrían unos ingresos de 1,5 millones de euros, así como las nuevas altas en el IBI, cuya previsión es que asciendan a 700.000 euros.
Además, “en fincas rústicas se prevén unos ingresos de 150.000 euros, mientras que por la tasa de tratamiento de basura se recaudarán 300.000 euros y no los 3 millones de euros de los que hablaba la oposición”, ha resaltado este edil, que también declara que “se pondrá a la venta parte del patrimonio para disminuir la deuda municipal. Se trata de fincas como La Longuera o Huerta Mata, así como determinados suelos en concesión administrativa”.
Del mismo modo, junto al aumento de los ingresos, “tenemos que disminuir los gastos y también proponemos unas medidas de recortes”. Estos se producirían en menos cargos de confianza, publicidad, atenciones protocolarias y otros gastos no cuantificados de dietas, entre otros.
“Además, se prevén recortes de un 40% en horas extraordinarias y gratificaciones llevadas a cabo por los empleados públicos, a lo que hay que unir el ahorro producido por la municipalización de determinados servicios, que puede suponer, en una primera fase, un ahorro de más de un millón de euros”, ha sostenido el actual edil de Hacienda, que ha dejado claro que “todo este tipo de medidas se trasladaría previamente a todos los grupos políticos para su discusión”.
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