CARTA AL DIRECTOR enviada por: Horacio Torvisco, de Alcobendas
La última película ganadora de la Concha de Oro del festival de San Sebastián, ‘Los domingos’ si algo tiene de especial es la catarata de diferentes opiniones que está generando. Son interesantes los diversos interrogantes que plantea.
Personalmente señalaría el que propone sobre el sentido religioso en el mundo actual. Muestra el de los creyentes, reflejados en la figura de una monja de perfil dogmático en sus planteamientos, sustanciados en forma de certezas incontrovertibles sobre la creencia de dios.
Un segundo planteamiento, más gregario, lo representa el padre de la joven, defendiendo un punto de vista religioso muy extendido donde su práctica es testimonial, solo para determinados eventos, algo que procura una aparente estabilidad social, luego por pura instrumentalidad es bueno creer.
El tercer planteamiento lo refleja la posición de una persona claramente no creyente y anticlerical, la tía de la joven, con ciertas incoherencias, pero que dice respetar a los creyentes.
En medio de estas tres posiciones ante la fe religiosa, emerge la figura de una adolescente con problemas personales y familiares que toma la decisión de hacerse monja de clausura con el afán de encontrar una anhelada paz espiritual o intelectual.
Creo que la mejor síntesis de esta buena película es la que me sugirió un amigo recientemente: “teníamos el mundo roto y ahora metemos a dios en la ecuación”. DIARIO Bahía de Cádiz














