En la misma semana en la que Cádiz vuelve a despedir al buque escuela de la Armada española, Juan Sebastián de Elcano, hasta la vuelta ya en julio tras su XCVII crucero de instrucción, en esta ocasión más mediático de lo normal al sumarse la presencia a bordo de la princesa de Asturias y futura reina de España, Leonor de Borbón, la asociación Cádiz con el Elcano está promoviendo una serie de acciones y actos, destacando la inauguración en la tarde del jueves en la Punta de San Felipe de la colocación de un antiguo mástil del bergatín goleta cedido por la Armada a la ciudad: testigo desde 1993 de once vueltas al mundo y más de dos millones de millas en su haber.
Dicho acto, presidido por el almirante jefe de Estado Mayor de la Armada, Antonio Piñero, y el alcalde Bruno García, ha consistido en el descubrimiento de la placa y en el arriado de la enseña nacional en el palo mesana mientras se interpretaba el himno nacional
Esta iniciativa, en la que también ha colaborado la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC), nace del “ímpetu” de Cádiz con el Elcano (entidad que persigue que la ciudadanía “participe y se sienta orgullosa” del papel que la capital gaditana desempeña como punto de partida de este emblemático barco), aprovechando el programa de actualización del buque escuela en 2022, cuando se acometió el reemplazo del mástil de mesana. En ese momento, la asociación planteó la sesión del mismo.
El proyecto de implantación ha sido financiado por la Autoridad Portuaria, mientras que la Armada se ha hecho cargo de la preparación del mástil, del traslado, así como de su colocación el pasado diciembre, cuando se trasladó en una gabarra desde el astillero de San Fernando. Tres grúas fueron necesarias para el izado de esta estructura de 21 toneladas.
Este palo de mesana lleva el nombre de Nautilus, en honor a la corbeta que de 1886 a 1910 sirvió como buque escuela en la Armada; la predecesora inmediata del actual Elcano, construido y botado en Cádiz en 1927. Se trata de uno de los cuatro mástiles principales del buque que, junto al velamen y a la jarcia, componen la arboladura del bergantín goleta.
Con este gesto, se remarca en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, “se materializa de forma permanente la estrecha relación que la Armada y la ciudad de Cádiz mantienen desde hace siglos, y en especial refuerza el cariño que los gaditanos tienen al buque”.
En este acto han estado presentes además el almirante de la Flota, el almirante de Acción Marítima, el almirante jefe del Arsenal de Cádiz, el director del Instituto de Historia y Cultura Naval y el comandante del buque escuela, entre otros.
“EN 2027 CELEBRAREMOS CIEN AÑOS EN CONTINUA COMUNIÓN CON CÁDIZ”
Durante el acto, en el que también han estado presentes entre otros el almirante de la Flota, el almirante de Acción Marítima, el almirante jefe del Arsenal de Cádiz, el director del Instituto de Historia y Cultura Naval y el comandante del buque escuela, el almirante jefe de Estado Mayor de la Armada ha destacado el “espíritu gaditano” del Juan Sebastián de Elcano “desde el bauprés en la proa, hasta el propio palo de mesana en la popa. Y esto se advierte tanto en su majestuosa silueta como en la alegría que nuestro buque escuela demuestra cuando avista la Tacita de Plata y emboca la Punta de San Felipe en su regreso a casa”.
Asimismo, Piñero Sánchez ha adelantado en su intervención que, como parece lógico, la capital gaditana acogerá en 2027 la celebración del centenario de la construcción y botadura de este barco: “celebraremos cien años de mar y vientos, de hispanidad; cien años en continua comunión con la ciudad de Cádiz”.
El XCVII crucero de instrucción será un viaje de más de seis meses que comenzará el 11 de enero a mediodía, con la presencia de los reyes, para despedir a su hija y heredera impuesta, quien ya escenificaba el embarque, junto al resto de guardiamarinas, en la tarde del miércoles.
En esta ocasión este embajador del Estado español recorrerá el Atlántico y el Pacífico en un itinerario que lo llevará a doce puertos de diez países diferentes, combinando la formación de sus guardiamarinas con la representación diplomática en el extranjero. Volverá a la Bahía de Cádiz el 21 de julio.
“NO SOLO HONRA NUESTRO PASADO, TAMBIÉN NOS PROYECTA HACIA EL FUTURO”
A raíz de este acto, el presidente de Cádiz con Elcano, Miguel Ramos, ha expresado su agradecimiento a todos los implicados en que el empeño de la asociación se haya hecho realidad, y ha considerado que el mástil “es mucho más que una estructura monumental. Es un símbolo de la historia compartida entre Cádiz y el Juan Sebastián de Elcano, un emblema que rinde homenaje a nuestra tradición marítima y a las generaciones que han hecho de este buque una parte fundamental de sus vidas”.
“A lo largo de casi un siglo, Elcano ha sido no solo un símbolo de la Armada española, sino también un pilar de la industria naval gaditana, ya que su mantenimiento anual se lleva a cabo en el Arsenal de La Carraca”, añaden desde esta entidad; desde la que insisten que el mástil “es un homenaje a los miles de marinos y trabajadores gaditanos que han navegado y cuidado el barco, así como a sus familias, que lo aprendido a sentir como algo propio; no solo honra nuestro pasado, sino que también nos proyecta hacia el futuro como custodios de un patrimonio naval único”.
