Autonomía Obrera vuelve a alertar del mal estado del sistema e instalaciones eléctricas del edificio del Ayuntamiento de Cádiz, en la plaza de San Juan de Dios. Ya lo hacía en otoño de 2023 ante el propio Consistorio y la Junta de Andalucía, pero en estos casi dos años el equipo de Gobierno de Bruno García “no ha hecho absolutamente nada”.
“Ante tanta dejadez”, este sindicato ha registrado denuncia ante la Inspección de Trabajo “por riesgo eléctrico” y también, nuevamente ante la consejería de Industria “responsable de vigilar y hacer que se cumplan las leyes y regulaciones”, a pesar de “no confiar en que actúe ni que este Ayuntamiento sea capaz de arreglar nada, tal como ha sucedido hasta ahora”.
En octubre de 2023, AO ya presentó escrito ante la consejería de Industria reclamando su intervención tras verificar que las instalaciones eléctricas de la Casa Consistorial “incumplen las normativas y estándares de seguridad mínimas exigidas”; sin embargo, desde entonces ha hecho “la vista gorda” con esta administración local (en ambos casos, con gobiernos del PP), “importándole lo más mínimo la seguridad del personal municipal, así como, la de los ciudadanos y usuarios”.
En dicha denuncia se exponía que en aquel momento el coordinador de Protección Civil y el técnico de Prevención y Riesgo Laboral hicieron hincapié en la necesidad de cambiar toda la instalación y cuadros, “por seguridad, ya que los mecanismos de protección están obsoletos”. Además, reflejaron que este edificio terminado en 1865 “no ha sido nunca inspeccionado por Industria ni se le ha exigido OCA”, al tiempo que “incumple la normativa de electricidad y también tiene carencias en el plan de emergencias a ejecutar en caso de siniestro”.
“SERÁN RESPONSABLES DE LAS CONSECUENCIAS EN CASO DE ACCIDENTE O SINIESTRO”
En el comunicado remitido a DIARIO Bahía de Cádiz, AO añade que el Gobierno local ha ignorado el informe técnico (OCA) emitido por una empresa autorizada, donde se indican los incumplimientos de seguridad eléctrica y las medidas a tomar; mientras la consejería de Industria de la Junta, “negligentemente en su deber”, no ha hecho nada al respecto, “mirando para otro lado, a pesar de estar al tanto del problema y teniendo la responsabilidad de vigilar y actuar ante la pasividad e irresponsabilidad del Ayuntamiento”.
“La dejadez de ambas administraciones ante los riesgos de cortocircuitos, incendios, daños a las personas, objetos y propiedad, son cada vez mayores y ambas serán las responsables de las consecuencias en caso de accidente o siniestro, ya que las aseguradoras no cubren daños si no hay certificación favorable de la inspección realizada por el organismo de control autorizado, y en este caso es negativa”, se remarcan.
Y SEGUNDA PLANTA “RUINOSA”
Para este sindicato, todo ello se agrava con el estado “ruinoso” de la segunda planta del edificio consistorial, que “se cae a pedazos”.
Al respecto, pasa a relatar la situación interna del Ayuntamiento: aseos clausurados, salidas de emergencias inaccesibles, humedades, excrementos de palomas, aparición de cucarachas y plagas de arañas por diversos departamentos, grietas en paredes y techos, lámparas que pesan una tonelada con sujeciones oxidadas y riesgo de caída, hacinación del personal funcionarial en los distintos departamentos de la planta baja, y atención tercermundista a las personas usuarias”, tanto en la propio Consistorio como en el vecino edificio Amaya.
Sobre actuaciones previstas en este edificio, sólo se sabe que el pasado febrero se aprobó en Junta de Gobierno Local el pintado de la fachada y arreglo de algunas fisuras por casi 54.000 euros; pequeña obra que todavía ni se ha adjudicado.