Para sorpresa de todos, el Gobierno local del PP en el Ayuntamiento de Cádiz ha anunciado varias operaciones entre las que destaca que pedirá otro préstamo para contar con 12 millones de euros para “tener la posibilidad” de comprarle a la Zona Franca la parcela de la antigua CASA, en Puntales, reservada para el prometido nuevo hospital, que desde hace unos meses la Junta de Andalucía también del PP se niega a seguir tramitando hasta que se le ceda gratis.
Un suelo donde se compromete a invertir 500 millones de euros al tiempo que busca todo tipo de excusas y artimañas para ahorrarse los 12 millones que supondría su compra directa, siendo además para un equipamiento de su exclusiva competencia.
La nueva idea del Ejecutivo municipal de Bruno García tras ver cómo el Consorcio (dependiente del Ministerio de Hacienda) le ha rechazado por inviables varias ofertas urbanísticas e inmobiliarias para hacerse con la parcela no ha tardado en ser aplaudida por el Gobierno de Moreno Bonilla (el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, ya ha celebrado la “gestión brillante” de su compañero de filas), y rechazada radicalmente por la oposición en el Ayuntamiento: el PSOE afea la “actitud sumisa” del alcalde hacía su partido y AIG denuncia un “despropósito” que garantiza a García “salvar su carrera política”.
Mientras, la Zona Franca ya ha dejado caer en varios medios que desconoce esta pretensión municipal y que de llevarse a cabo complicará y retrasará todavía más que algún día se construya el hospital, por la tramitación urbanística.
SUELO PARA EL HOSPITAL…, Y PARA VIVIENDAS
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz, la derecha en el Consistorio aclara que quiere la propiedad de este solar en Puntales para reparcelarlo y ceder la parcela de mayor tamaño a la Junta para el hipotético hospital, pero también para promover vivienda (unas 200): y es que se quedaría con parte del suelo, donde se vuelcan los aprovechamientos urbanísticos.
Para culminar esta adquisición sin rechistarle a la Junta ‘amiga’, se iniciaría un Plan de Reforma Interior (PRI) desde el Área de Urbanismo en la parcela para materializar los aprovechamientos urbanísticos por valor de 12 millones, que es la cantidad que se abonaría a Zona Franca.
Dichos aprovechamientos son una parte de todos los resultantes del convenio que se firmó entre varias administraciones en el año 2008 y que se encuentran, según el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en vigor, en la actual pastilla que ocupa el Hospital Puerta del Mar en la avenida.
“Ponemos esta solución encima de la mesa. No obstante, si hubiera otra, nos comprometemos a que esos 12 millones de euros serían para generar nuevas viviendas en cualquier otro punto de la ciudad”, ha remarcado el alcalde en una rueda de prensa junto a sus concejales de Urbanismo y de Hacienda, José Manuel Cossi y Maite González, respectivamente.
Y SE DEVOLVERÁN CASI 26 MILLONES GRACIAS AL REMANENTE DE 2024
Esta operación de crédito que se eleva casi a los 20 millones de euros y que se votará en el pleno ordinario de este mes de julio se va a poder realizar porque, previamente, en la misma sesión, se abordará otra modificación presupuestaria para amortizar casi al completo el préstamo que se formalizó en diciembre de 2024.
De manera que, gracias a los remanentes de la liquidación del último presupuesto “que ha de destinarse al pago de deuda por obligación de las reglas fiscales”, ha precisado el alcalde, se va a poder devolver 25,5 millones de los 27 que se solicitaron para tener crédito para tres obras todavía pendientes, el parque del cementerio, la mejora de la avenida de Astillero y la rehabilitación del frente de las Puertas de Tierra.
Por otro lado, Bruno García también ha destacado que la deuda del Ayuntamiento que quedará tras estas nuevas operaciones rondará los 77,5 millones de euros, “unos 20 millones menos de la que se recibió del anterior equipo de gobierno, que ascendía, en junio de 2023, a 97,07 millones”.
En este punto, conviene recordar que el ejecutivo izquierdista de José María González ‘Kichi’ tuvo que lidiar en 2015, tras 20 años de Teófila Martínez en San Juan de Dios, con una deuda global heredada de 275 millones de euros, que supo recortar de forma considerable durante sus ocho años de gestión; un saneamiento económico del que se beneficia ahora el Gobierno popular.
En cuanto a ese nuevo préstamo que se pretende pedir por valor de 19,7 millones de euros, además de reservar 12 millones a la posible compra del suelo del hospital, se destinará también a cerrar la financiación del eternizado proyecto del Pabellón Portillo (más de 4,6 millones); a la demolición de la lonja de frutas “y a los primeros pasos de esa promoción de vivienda pública o cualquier otra” (1,4 millones); y a la expropiación o adquisición de fincas para el desarrollo de vivienda pública (1,7 millones).
“La ciudad quería un cambio y nosotros lo estamos propiciando. Por ello, para sacar todos estos proyectos adelante es necesaria voluntad y financiación y eso es lo que vamos a llevar a pleno con estas dos modificaciones”, ha resumido Bruno García.

PSOE: “SE ESTÁ ENDEUDANDO A LOS GADITANOS PARA SALVARLE LA CARA A SU PARTIDO”
La oposición municipal no ha tardado en reaccionar al órdago del Gobierno gaditano del PP tratando de desbloquear el culebrón del prometido hospital. Para el PSOE, “la sumisión de Bruno García a su partido es tal que a este paso terminará regalándole el Teatro Falla a la Junta de Andalucía; una actitud sumisa, incapaz de pedir nada a su propio partido, que no trae más que problemas”.
Para el portavoz municipal socialista, Óscar Torres, que critica que sea el Ayuntamiento quien asuma la compra de los terrenos “cuando es algo que le corresponde a la Junta”, con esta operación bancaria “se está endeudando a los gaditanos para salvarle la cara a su partido”.
“En los últimos nueve meses Bruno García, entre lo anunciado y lo aprobado, va a endeudar al Ayuntamiento por valor de 47 millones de euros; a este paso, la deuda que dejó Teófila Martínez en 2015 será insignificante comparada con la que va a dejar el actual alcalde”, añade el principal partido de la oposición.
Además, Torres exige a Bruno García que haga público “el convenio que debe tener firmado con la Junta” en el que el Gobierno de Moreno Bonilla se compromete a la construcción del hospital: “no sería entendible otra forma de proceder porque, si no, esta nueva deuda no habría sido más que una artimaña para tapar la inacción de la Junta con el nuevo hospital”.
AIG: “¿POR QUÉ LOS GADITANOS TENEMOS QUE PAGAR UNA OPERACIÓN QUE DEBE EJECUTAR LA JUNTA?”
Por su parte, al portavoz municipal de Adelante Izquierda Gaditana, David de la Cruz, esta decisión de la derecha local le parece “absolutamente escandalosa”: “se vuelve a endeudar al Ayuntamiento con la intención de salvar los muebles, una vez más, al PP y a Moreno Bonilla, que no tendrá que poner ni céntimo en esta operación”.
“¿Por qué los gaditanos tenemos que pagar de nuestro bolsillo una operación que debe ejecutar de principio a fin la Junta?”, se pregunta el líder de AIG, que lamenta que ésta sea la fórmula elegida por Bruno García “para salvar los muebles al PP y, con ello, su propia carrera política dentro del partido”.
Asimismo, califica como un “auténtico despropósito” que “seamos exclusivamente los gaditanos quienes tengamos que pagar esta operación, pues no será un centro hospitalario exclusivo para la ciudad de Cádiz, sino un hospital de referencia para todo el entorno de la Bahía y el resto de la provincia”.
Al mismo tiempo, De la Cruz resalta que la operación que pretende llevar a cabo el alcalde en “suelo público” incluye también la construcción de 200 viviendas, “facilitando así el PP una vez más a las constructoras que puedan pegar su pelotazo urbanístico en nuestra ciudad”.
“Hoy Bruno García ha dejado bien claro que prefiere endeudar a Cádiz antes de dar un golpe en la mesa y exigir a la Junta que cumpla con su promesa. Pasamos del ‘Juanmaloharía’ a ‘Cádizlotendráquehacer’ por voluntad de un alcalde que no vela por los intereses de esta ciudad ni de sus vecinos”, sentencian desde la coalición izquierdista en la oposición.