CRÓNICA JORNADA 5. La Sociedad Deportiva Eibar, escuadra que conoce bien Gaizka Garitano, visitó el Nuevo Mirandilla en la sobremesa del sábado (con unas 14.000 personas haciendo la digestión en la grada) para enfrentarse a un Cádiz en busca de su tercera victoria consecutiva como local, para seguir navegando en la zona alta de la tabla en este decente arranque liguero.
“Hay que seguir con la línea de los partidos en casa. Contra el Eibar, un equipo con un bloque muy fuerte, será igualado. Si hacemos las cosas bien y aumentamos los minutos de buen fútbol, tendremos opciones”, reflexionaba el técnico vasco en la previa, insistiendo en que “tenemos futbolistas muy jóvenes que tienen que seguir aprendiendo para mejorar”, y sin darle demasiada importancia a las bajas médicas de Ontiveros, De la Rosa o David Gil.
El once de los amarillos destacaba por la primera titularidad del extremo georgiano, héroe de los dos últimos choques (con tres goles en apenas minutos). Así, salieron de inicio: Víctor Aznar, en portería; Iker Recio, Iza, Kovacevic y Climent, en defensa; Diakité, Ortuño y Diarra, en el centro del campo; Suso y Tabatadze, en las bandas; y Álvaro García Pascual, en la delantera.
Con el conjunto armero más entonado y muy pegajoso, ante un Cádiz con muchos problemas para sacar la pelota desde su campo, se desarrollaba el primer cuarto de hora de encuentro, sin apenas peligro real en las dos áreas. Hasta que el aplaudido y voluntarioso Tabatadze recibía el balón en el 19 al borde del área, y disparaba con cierta intención, desviado.
No terminaba de despertar el juego con el paso de los minutos. Los vascos seguían llevando de alguna manera la iniciativa, y el Cádiz se asomaba por sus dominios en arreones, como al borde del 45, cuando no era capaz de culminar una extraña acción con todo a favor.

ZURDAZO DE SUSO
A la espera de que el Nuevo Mirandilla despertara de la siesta, echaba a rodar el segundo tiempo. Corpas ponía a prueba pronto los reflejos de Víctor Aznar; y dos minutos después era Adu Ares el que cabeceaba fuera. Parte de la grada empezaba a reaccionar con tímidos pitos palpando que los amarillos seguían en el vestuario. Así llegaría en el 52 la respuesta local, un zapatazo lejano de Iza Carcelén por encima del larguero; pero también un lanzamiento cruzado en el otro lado de Magunazelaia.
Con el estadio ahora sí animando y metiendo presión, el Cádiz parecía ir entrando en calor y Suso gozaba de otra buena ocasión, a las manos del portero. Y el mismo gaditano, en el 60, lo volvía a intentar y esta vez sí clavaba la pelota con un zurdazo dentro de la portería, subiendo al marcador el 1-0. Su primer tanto oficial con el equipo de su ciudad.
Diez después, una pérdida de Diakité en el centro del campo estaba cerca de suponer el empate, salvado por Aznar. Era el momento de menear el banquillo cadista: se retiraban García Pascual y Tabatadze y entraban Dawda y Efe Aghama. Y Yussi Diarra cabeceaba fácil a las manos del portero vasco.
El Cádiz supo afrontar la última fase del partido sin meterse atrás, y a la vez con solidez, ante un Eibar que ahora ya no encontraba huecos. Poco antes de los seis minutos de añadido extra, Álex Fernández entraba por Suso, el brazalete pasaba de capitán a capitán. Y pese a que se sufrió, y vaya si se sufrió en los últimos instantes de la prórroga (Víctor Aznar protagonizaba otras dos intervenciones decisivas), los tres puntos se quedaron finalmente en la Tacita. Aunque, siendo objetivos, los visitantes merecieron más.
Ya son 11 de 15 puntitos en este inicio del curso 2025/2026, en el que todavía no se conoce la derrota. De momento el aire renovado que respira este Cádiz competitivo, las ganas y actitud, y la re-conexión con la afición, están mitigando la juventud e inexperiencia de muchos, las carencias sobre el verde y los errores y despistes defensivos.
Para Garitano, ha sido una victoria “muy trabajada, hay que darle mérito a lo que ha hecho el equipo ante un gran rival. Al principio nos ha costado, ellos han presionado muy fuerte. Hemos ido mejorando y en la segunda parte hemos sido superiores”. “Mientras sumemos puntos en esa construcción de equipo nuevo, bienvenido sea”, terminaba remarcando el técnico del Cádiz CF, que no se olvidó de reconocer que en casa “la afición nos está llevando en volandas”. DIARIO Bahía de Cádiz