El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), en colaboración con la Universidad de Sevilla, ha localizado restos arqueológicos en las inmediaciones del islote de Sancti Petri, en aguas que comparten Chiclana y San Fernando, que podrían corresponder con la antigua almadraba documentada desde el siglo XV, pero sin ubicación exacta hasta el momento.
Se trata de un hallazgo “de especial relevancia científica, ya que es la primera vez que se encuentran evidencias arqueológicas de instalaciones pesqueras en el islote gaditano”, se subraya desde la consejería de Cultura y Deporte de la Junta en la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz.
Las excavaciones, realizadas en el marco del proyecto ‘Vestigium. Arqueología y Paleobiología Intermareal. El patrimonio de las playas de Cádiz como motor económico y de participación social’, han permitido identificar y documentar dos estancias que estaban ligadas a la actividad de la pesca del atún, junto a restos de fauna marina (peces diversos y moluscos) y terrestre, más anzuelos, pesas de red y útiles de cobre y hierro, así como cerámicas de cocina de gran tamaño, asociadas a un consumo colectivo, probablemente de trabajadores de la pesca y la guarnición.
Estas estancias, que son parte de una construcción que debió ser más amplia originalmente, aparecen recogidas en planos de 1717-1727.
SOBRE RESTOS PÚNICOS Y ROMANOS
El análisis de los restos bajomedievales y modernos ha sacado a la luz indicios materiales de ocupaciones anteriores en el islote de Sancti Petri. Estos hallazgos apuntan a que las instalaciones pesqueras se levantaron sobre un área con restos púnicos tardíos y romanos imperiales.
Su importancia, apuntan los expertos del IAPH, viene dada porque nunca se habían documentado contextos y materiales de época romana imperial en el islote, en consonancia con hallazgos de estatuaria romana registrados en su entorno cercano.
Los pavimentos de mortero y ladrillo evidencian reutilización de los espacios, lo que muestra su uso prolongado en el tiempo. Esta larga ocupación pone en valor el enclave como referente para comprender la historia marítima de la costa gaditana.
Gracias a las excavaciones también se ha podido fechar el abandono y colapso parcial del edificio en el siglo XVII, etapa en que el castillo crece como fortificación.
La chanca de la almadraba de Sancti Petri fue promovida por Rodrigo Ponce de León, marqués de Cádiz, y quedó bajo jurisdicción de la Corona a partir de 1493. Se mantuvo activa durante buena parte de los siglos XVI y XVII.
SONDEOS EN PATIO Y BALUARTE
Otros sondeos realizados en el patio y junto al baluarte de poniente del actual castillo de Sancti Petri han aportado una secuencia estratigráfica de más de 2 metros que permite descifrar la secuencia de ocupación del islote desde la Prehistoria hasta nuestros días.
Así, se han identificado materiales y estratos de época fenicia y romana, asociados a niveles de dunas móviles costeras, que debían constituir el elemento característico del paisaje del islote en la Antigüedad.
Y, por primera vez, ha sido posible analizar la secuencia de construcción de las baterías y baluartes, así como los métodos empleados para cimentar la fortaleza.
Todas estas actuaciones se han realizado en coordinación con el Parque Natural Bahía de Cádiz, que ha delimitado las zonas de intervención para proteger la flora endémica, así como con la empresa concesionaria del castillo, que colabora en el desarrollo de actividades divulgativas.
El equipo que ha participado en esta actividad ya desarrolla la recreación 3D del islote y el castillo, además de materiales de difusión que acerquen estos resultados al público.
Estos trabajos se enmarcan en una estrategia de investigación a medio plazo que incluye también sondeos en la playa de Camposoto, en San Fernando, y en el Coto de la Isleta, en Chiclana. Las prospecciones llevadas a cabo hasta el momento complementan las informaciones de las fuentes archivísticas y la cartografía histórica, así como los datos arqueológicos obtenidos en intervenciones efectuadas en la zona sur del castillo en los años 1985 y 2009.
El proyecto Vestigium es una iniciativa de I+D+i de concurrencia competitiva que cuenta con una ayuda de más de 230.000 euros del Plan Complementario de Ciencias Marinas y de fondos europeos Next Generation. Su coordinación se realiza desde el Centro de Arqueología Subacuática (CAS, con sede en la capital gaditana), unidad especializada en patrimonio sumergido del IAPH, con la participación de investigadores del CSIC y diversas universidades españolas.
EL “LIDERAZGO” DEL IAPH
A colación, la consejera de Cultura y Deporte, Patricia del Pozo, ha destacado que “el proyecto Vestigium sigue dando excelentes resultados en la costa gaditana”. Meses atrás ya se constaba “la existencia de un yacimiento pleistocénicos de huellas de grandes mamíferos en la isla de San Sebastián, en Tarifa, y, ahora, un nuevo trabajo de profesionales del IAPH ha permitido localizar evidencias arqueológicas de instalaciones pesqueras en Santi Pectri”.
En este sentido, esta política del PP sobresale el papel del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico como agente del conocimiento, y su enorme capacidad para liderar la investigación patrimonial no solo en materia de conservación y difusión, “sino también convirtiéndolo en un recurso fundamental para el desarrollo económico de Andalucía”.

















