Las playas de la Bahía de Cádiz, como se anunció semanas atrás, estrenan este verano un sistema “pionero a nivel mundial” de vigilancia con sensores en el mar, que se irá completando en 2026. Una iniciativa promovida por la Mancomunidad de Municipios de la Bahía de Cádiz y costeada con fondos de la Diputación, que supone “un salto cualitativo en el seguimiento ambiental de nuestras playas”.
Dicha herramienta (con el nombre Water Biosense) permitirá monitorizar en tiempo real los parámetros físico-químicos y microbiológicos, en especial los niveles de E-coli y Enterococos, dos de los principales indicadores de calidad del agua de baño establecidos por la normativa nacional y europea.
La actuación se va a llevar a cabo en dos fases. Para este 2025 se ha priorizado una implantación inicial en cuatro localizaciones estratégicas “de alta representatividad geográfica y operativa en la comarca”: la playa de Valdelagrana, en El Puerto de Santa María; Chorrillo-Rompidillo, Rota; Sancti Petri, en Chiclana; y La Cachucha, en Puerto Real.
Y en una segunda fase, prevista para 2026, se completará llegando a las playas de La Caleta, Santa María del Mar y la Victoria (en la capital), Camposoto (en San Fernando), La Muralla y La Puntilla (en El Puerto), La Barrosa (en Chiclana) y Costa Ballena (en Rota).
La actuación, calificada de “hito histórico en innovación tecnológica y sostenibilidad”, se ha encargado tras el correspondiente concurso público por más de 218.000 euros (el coste de la primera fase). Se trata de un sistema completamente autónomo con ingeniería desarrollada casi al 100% por empresas de la Bahía: WDTech (de El Puerto), Tecysa (de Jerez) y Sensactive Technology (de Granada).
Además de garantizar una mayor seguridad para los usuarios de las playas, el sistema optimiza recursos públicos al reducir costes de personal y laboratorio, “ya que las boyas son autónomas, de bajo mantenimiento y operativas en remoto”.
“DESDE LA BAHÍA SE PUEDEN EXPORTAR TECNOLOGÍAS PUNTERAS”
Y la primera baliza inteligente se colocaba recientemente en Valdelagrana, con la presencia entre otros del presidente de la Mancomunidad y concejal portuense, Millán Alegre, quien insistía en que este proyecto “nos sitúa a la vanguardia mundial en gestión inteligente del litoral. Apostamos por la innovación como herramienta para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía y proteger nuestro entorno natural”.
A su vez, el responsable de WDTech, una de las empresas implicadas en la iniciativa, anotaba que “el proyecto demuestra que desde la Bahía se pueden exportar tecnologías punteras con un alto valor añadido y potencial de escalado internacional”.
En la nota remitida a DIARIO Bahía de Cádiz se sobresale que el desarrollo de este sistema “ha generado un precedente único no solo en España, sino en todo el mundo”. Su capacidad de anticipación frente a fenómenos de contaminación junto a su carácter modular y replicable “han despertado ya el interés de países como EEUU, lo que posiciona a la Bahía de Cádiz como un referente internacional en la aplicación de tecnologías para la gestión costera y la seguridad ambiental”, se añade.
Así, con la instalación de esta primera boya en una playa de El Puerto, la Bahía inicia el camino hacia una red de playas inteligentes que llegará a toda su costa (desde Rota a Chiclana), “alineada con los objetivos de sostenibilidad, seguridad y modernización de los servicios públicos costeros”.