Juan Rodríguez Romero, nacido en 1947, es natural
de Sanlúcar de Barrameda. Un sanluqueño que ama su tierra. Y es que “obras son
amores y no buenas razones”, porque en efecto, la infinidad de obras que gracias
a Juan han sido interpretadas en Sanlucar durante los 25 años de vida del
Festival Internacional “A Orillas del Guadalquivir” son las obras que avalan la
pasión de este sanluqueño por su tierra.
Ser de Sanlúcar y ser a la vez alguien relevante
en el panorama mundial de la música es algo que saben bien los que conocen a
Juan, quien posee un currículum de vértigo desde que comenzara sus estudios en
el conservatorio Superior de música de Sevilla. Lleva a gala ser el director del
Concurso Internacional de clarinete “Ciudad de Dos Hermanas” desde 1991. Posee
varios premios internacionales, y ha sido alumno de destacados profesores de
Piano, Composición y Dirección. En la actualidad es Director titular de las
orquestas Musiziergemeinschaft del Mozarteum de Salzburgo desde 1975 y Camerata
Austríaca de Linz desde 1985. Es catedrático del Conservatorio Superior de
música de Sevilla y académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes
“Santa Isabel de Hungría” de Sevilla.
JESÚS SÁNCHEZ-FERRAGUT-BAHÍA CULTURAL-: ¿Por
qué este homenaje al colegio El Picacho del ISM?
JUAN RODRÍGUEZ ROMERO: Si desde el
principio no hubiéramos tenido la colaboración del Picacho, no se hubiera hecho
el Festival. Tuve desde el principio esta colaboración para traer a los músicos,
porque la música no sólo es tocar, es convivir. La importancia de la
comunicación con la gente, y entonces vimos que este era el sitio ideal. Yo ya
conocía el Picacho, pues había venido unos años antes de crear el Festival, con
mi orquesta de Salzburgo, cuando íbamos de tournée, pese a que siempre íbamos de
gira por Valencia y Cataluña, y quise venir por mi tierra. Cada uno quiere ir a
su tierra, y yo veía aquí el clima ideal, la gente, los aplausos vividos
intensivamente. La gastronomía, la manzanilla, la playa…
BC: ¿Qué ha traído de Salzburgo a Sanlúcar?
JRR: Siempre soñaba con traer algo de
allí a Sanlúcar, pero claro, nunca puedes pensar que un festival como el de
Salzburgo, con un presupuesto de ocho mil millones de presupuesto, el más
importante del Mundo, se pueda traer a Sanlúcar, pero sí una “mijita” pequeñita
quise traerme de allí (Juan mantiene el acento sanluqueño perfectamente, pese a
que tuve la ocasión de oírle hablar en alemán y francés al comienzo del
concierto).
BC: Bueno, al menos a Mozart lo ha traído desde
el Festival de Salzburgo.
JRR: El primer año traje mi orquesta de
Salzburgo, en una experiencia que yo no sabía cómo iba a salir. A partir de ella
hicimos varios conciertos con diferentes solistas, cuartetos, orquesta de
cámara, etc. Luego hicimos una semana de orquesta y coros, porque yo quería que
la gente de aquí también participara. Y de Andalucía, pues soy más andaluz que
nadie además de sanluqueño. En esos primeros años fue importante que yo sabía
que es lo que los músicos que venían querían, y era la convivencia, algo del
lugar y el entorno. Los primeros incluso cocinaban aquí en el Picacho.
BC: ¿Cómo ha evolucionado el Festival “A
Orillas del Guadalquivir”?
JRR: El festival ha evolucionado y hoy
en día vienen orquestas de los países del Este, que se adecuan a los
presupuestos. Tenemos ópera y ballet. Hay un núcleo estable de la orquesta del
Festival, como en muchos festivales importantes, Salzburgo, Montecarlo, etc.,
que es la que lleva la filosofía, la línea musical del Festival. También da
servicio. Y hay gracias a este núcleo podemos programar composiciones y
grabaciones propias. Por eso este año dirijo una obra de Stanley Weiner,
violinista solista, que fue concertino de la Orquesta Sinfónica de Nueva York,
bajo la dirección de Berstein. La obra que dirijo es el “Concierto de Sanlucar
nº 3” para violín, flauta y Orquesta. Son en total seis los conciertos de Weiner
dedicados a Sanlúcar, en un pequeño paralelismo con los conciertos de
Brandemburgo de Bach. He invitado a su viuda este año. Están grabados los cinco
primeros conciertos y el sexto no se pudo llegar a grabar pues falleció Weiner
antes de poder efectuar la grabación. He invitado también este año a la viuda de
Marcel Ançion, clarinetista de Bruselas, que siempre venía a Sanlucar. Es un
pequeño homenaje. También se tocará “Soleares a Sanlúcar” (Oboe, chelo, clave y
percusión) de C. Bergen, uno de los compositores actuales de más prestigio
internacional.
BC: Muchas gracias a Juan Rodríguez Romero, le
deseamos el mejor de los éxitos a este sanluqueño que se define como director,
pedagogo y psicólogo. Que siga enseñándonos y deleitándonos con su música muchos
años.
(Él no nos lo cuenta, pero hoy jueves 11 dirigirá
la “Orquesta Camerana Austriaca de Linz”, y entre las obras del programa está
“CABALLOS, LUZ Y MAR” , para piano y orquesta, obra de la que el mismo es autor,
compuesta con ocasión del 160 aniversario de las Carreras de Caballos de
Sanlucar.) |