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José Luis Figuereo Franco, El Barrio, ofreció en
Jerez a sus incondicionales la presentación de la gira promocional de su último
disco, “Las playas de invierno”. El Barrio ofrece un producto difícil de
encuadrar en un solo concepto. Sus puestas en escena son algo más que un
concierto. Son un espectáculo que supera al mero recital tradicional. Y es que
El Barrio transmite algo de Predicador. Sacerdote del amor. Pero de un amor
conceptual y no puntual como reza en sus definiciones promocionales. Hechicero,
invoca el ritmo con pasmosa facilidad. Brujo del arte flamenco, se arranca con
la danza de los sentimientos. Taumaturgo de la voz, la hace aparecer y
desaparecer bajo fórmulas actuales o tradicionales.
Flamenquito; flamenco pop y flamenco rock,
coplillas, rumbas, tangos, bulerías...van sonando poco a poco durante el tiempo
que dura la actuación. ¿Quién dijo que le gustaría ver un concierto de flamenco
en plan macroconcierto? Pues aquí lo tienen. El secreto está en mantener ese
difícil equilibrio para que la gente esté continuamen te
animada, de pie, bailando, sintiendo, apreciando... Pasándolo bien en
definitiva.
La música de El Barrio entra bien, de manera
fácil, sin que ello le reste calidad a la composición en concreto, y engancha a
mucha gente, de diversa procedencia y condición.
La actuación del pasado viernes en una inmensa
carpa instalada al efecto en la zona de Chapín, de Jerez, daba la salida a una
serie de 29 conciertos por toda la geografía española, para presentar un trabajo
que nada más publicarse y ponerse a la venta, alcanzó el disco de platino
(150.000 copias vendidas).
Entrando en materia, es decir, en el concierto en
sí, hay que destacar algunas cosas. En primer lugar José Luis Figuereo, que se
encontraba totalmente a gusto con su público. Luego, la magnífica intervención
de Juani de La Isla, a la guitarra flamenca. De lujo. No se le puede pedir más
rendimiento a una guitarra flamenca electrificada.
El Barrio interpretó 20 temas, de los que
destacaron los pertenecientes al último álbum, del que sonaron 10 de las doce
canciones del mismo: “El comienzo”, “Las playas de invierno”, “Fiel amigo”,
“Querida enemiga”, “Ausencia”, “Yo soñé”, “Maestra del fracaso”, “Trucos”,
“Diario de uno más” y “Ábreme la puerta”. Un homenaje al legendario grupo “Triana”:
“Tu frialdad”, y temas de su anterior trabajo: “Ángel malherido”, “A mi majara”
y “Quiéreme”, junto con otras canciones.
Los músicos, coros y palmeros bien en general, y
el formato del concierto, sobre la base de lo que un gran concierto debe ser: Un
importante despliegue de luces, sonido compacto y bien definido, controlando las
distorsiones. Original el fondo de bombillas y la forma de presentar algunas
canciones y los nombres de los componentes de la banda.
La puesta en escena bien, con ideas, aunque con
los problemillas típicos de los comienzos de una gira. Un poco de despiste en
algunos momentos entre canción y canción.
La organización por el contrario no fue lo que más
brilló. La carpa instalada, no por grande resultó ser todo lo útil y necesaria,
pues una buena parte del público se mojó con la lluvia dentro de la misma,
aflorando los paraguas, en una imagen un tanto extraña. A la salida un tanto de
confusión, ante la tremenda tromba de agua que caía.
Al final, El Barrio se despidió cantando por
bulerías, improvisadas, fuera de programa como no podía ser menos, ante un
público de Jerez.
·Playas
de invierno en Jerez
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